La Gerencia de Atención Sanitaria del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (INGESA) en Ceuta ha formalizado esta semana el contrato para la adquisición de 15 cámaras de vigilancia de exteriores y de 20 para interiores para el Hospital Universitario por un importe, impuestos incluidos, de unos 36.000 euros.

La Administración sanitaria ha tardado lo suyo en completar el procedimiento. Hace ya casi un año y medio desde que el jefe del Servicio de Informática alertó de que tenía multitud de cámaras “averiadas” y de que el problema, además, venía de lejos.

“Desde el año pasado [por 2018] que solicitamos y facilitamos los modelos de cámaras compatibles con nuestro sistema al Departamento de Suministros estamos esperando la compra por inversiones de las mismas”, lamentó en su escrito.

Durante ese tiempo el INGESA fue tirando “sustituyendo las cámaras averiadas hasta acabar con las existencias”.

En enero del año pasado la Dirección Territorial y la Delegación del Gobierno doblaron de urgencia el servicio de vigilantes nocturnos del clínico de Loma Colmenar después de detectar la entrada de dos individuos “encapuchados” en la zona industrial del Hospital, donde se encuentran los depósitos de distintos productos inflamables.

El Pleno de la Asamblea acordó en julio pese a no tener competencia alguna a instancias de Vox y con el voto a favor del PP reforzar la vigilancia de las instalaciones sanitarias de la ciudad