PROYECTO

El lento camino de la Rampa de Abastos hacia su nueva vida

El lento camino de la Rampa de Abastos hacia su nueva vida
Rampa de Abastos. Siglo XVIII. Bien de Interés Cultural
Rampa de Abastos. Siglo XVIII. Bien de Interés Cultural
El BOE anuncia la formalización del contrato para la redacción de proyecto y dirección de obra, el primer paso para su rehabilitación como archivo general y museo militar, que debía estar listo en agosto

El Boletín Oficial del Estado anuncia en su edición de este 31 de octubre la formalización del contrato para la redacción de proyecto y dirección de obra para la rehabilitación de la Rampa de Abastos como archivo general y museo militar. Una obra que, prometió el Gobierno, podría iniciarse en 2023 y que hoy ha dado el primer paso. Aunque con más de dos meses y medio de retraso.

El pasado mes de marzo, en respuesta a una interpelación del Grupo Parlamentario Socialista en el Pleno de Control al Gobierno, el consejero de Educación y Cultura, Carlos Rontomé, explicó que las previsiones pasaban porque el proyecto de ejecución de la obra estuviera terminado a lo largo del verano. Pero más de dos meses y medio después y solo se ha adjudicado su redacción. Tras eso llegará la parte de la licitación que se prevé pueda adjudicarse en el primer trimestre de 2023, según los planes del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, que sería el responsable del proyecto, si bien la Ciudad mantiene el compromiso de aportar 1,1 millones de euros.

Un proyecto que a punto estuvo de perderse. La Ciudad Autónoma tenía la titularidad del inmueble en virtud de un convenio con el Ministerio de Defensa firmado en 2016, pero se agotaba el plazo de cuatro años desde la firma del acuerdo y aún no había hecho su parte de la rehabilitación del edificio. En el anexo a la concesión demanial de la Rampa de Abastos, un edificio BIC, se establecía que antes del día 1 de enero de 2020 la Ciudad debía invertir 1.100.000 euros en su remodelación. Si no cumplía con su parte, Ceuta debería devolver el edificio.

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Un entuerto que resolvieron los Presupuestos Generales del Estado sin que el Gobierno local tuviese que mover un dedo.  El Estado tomó el timón del proyecto, optando por el concurso de ideas para dar una nueva vida al viejo almacén, que en cierto modo no perdería su uso original al pasar a ser el Archivo General de Ceuta. En diciembre de 2019, el entonces Ministerio de Fomento y hoy de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, anunciaba la la licitación del Concurso de proyectos con intervención de jurado para la rehabilitación del almacén de Abastos de Ceuta como Archivo General de Ceuta y Museo Militar. ‘Lienzo de la Almina’, el proyecto firmado por el estudio de arquitectura valenciano Balman Consultores y Alejando Martínez del Río, fue el ganador en un concurso de ideas, elegida entre 22 candidatas.

La Rampa de Abastos no dejará en cierto modo de ser un almacén. Aunque ahora almacenará la memoria de Ceuta. El nuevo edificio deberá albergar todos los tesoros del Archivo General. Las nuevas instalaciones tendrán que albergar libros y cajas que uno tras otro supondrían más de16 kilómetros lineales: 60.000 cajas de documentos en papel, 25.000 unidades de fotografías en papel y 500 en cristal,15.000 planos individuales, de los cuales 100 son de gran formato,1500 cintas de vídeo y algunos soportes plásticos en otros formatos de grabación, 500 impresos de varios tamaños y más de mil libros de Protocolo Notariales.

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Pero, a la vista del lento y proceloso caminar del proyecto, la Rampa de Abastos aún deberá esperar largo y tendido para comenzar su nueva vida, esta vez ta no como almacén de abastos sino como memoria de la ciudad.

El lento camino de la Rampa de Abastos hacia su nueva vida


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