A la “paulatina merma” de vehículos en el parque móvil de la Policía Local de Ceuta, donde algunos de los coches patrulla cuentan con más de doce años de antigüedad, se suma “el riesgo que entraña el manejo de alguno de ellos”. Dos razones de peso que han obligado a la Ciudad a comprar quince nuevos turismos por más de medio millón de euros a cargo del presupuesto del presente año para garantizar el correcto funcionamiento del cuerpo.

La reparación de algunos de los patrulleros más veteranos resultaba, según el informe de necesidad aportado por el Ejecutivo local, “antieconómica”; y otros tantos habían perdido su “operatividad por la falta de confianza en la respuesta de estos vehículos”.

Dadas las circunstancias la Consejería de Presidencia y Gobernación ha sacado a contratación la adquisición de nuevos coches, así como su puesta a punto, legalización e inspección técnica.

A pesar del auge de los coches híbridos y eléctricos, la Ciudad ha apostado por los motores de gasolina con un mínimo de 130 caballos y un depósito de al menos 53 litros; las cajas de cambio manuales con seis marchas y los mecanismos de tracción delantera.

Además, entre el equipamiento exigido por Presidencia figura la iluminación interior tipo led, climatizador automático bizona, retrovisores exteriores con ajuste eléctrico y calefactable o llantas de aluminio.

A todas estas prestaciones la adjudicataria deberá añadir el llamado Kit de Detenidos (mampara de separación, puertas traseras de apertura únicamente exterior, ventanas oscurecidas…), una botonera de control de 21 teclas, un amplificador de sirena de 100 vatios, un micrófono de mando y la instalación de toda la iluminación reglamentaria. También deberá aportar un extintor, mochila de primeros auxilios, un dispensador de cinta policial o un lector de mapas.

Entre las especificaciones sobre el diseño de los vehículos, los pliegos de la licitación especifican que estos no llevarán números en el techo y que el reconocible damero reflectante deberán ser de una sola pieza.

Una larga lista de requerimientos que, sin embargo, no deben superar los 37.000 euros por vehículo, que deberá pasar la ITV y estar matriculado antes de llegar a la ciudad autónoma. Queda por ver si en esta ocasión la Ciudad será capaz de llevar a buen término la licitación, ya que, como los propios pliegos admiten, “a pesar de que se han iniciado expedientes de contratación de coches patrulla en los últimos años, en algunos casos no se ha llegado a materializar por causas no imputables al órgano de contratación”.