La delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, ha recibido este lunes a la jefa del Proyecto de Conexión del Cable que unirá Ceuta con la península, Sara Sevilla, y la responsable de la tramitación del proyecto, Águeda Arévalo, una vez "resueltas" ya todas las incidencias que se sucedieron en relación con la ubicación de la subestación peninsular que el alcalde de La Línea se negó a acoger en su término municipal.

El cable que unirá Ceuta con la península tendrá un doble circuito uno submarino y otro subterráneo. Tendrá, según las estimaciones, una longitud cercana a los 70 kilómetros, 60 bajo el mar y de 10 en tierra soterrados íntegramente. El tramo terrestre en Ceuta está "totalmente definido" y el trazado en la península está "fijado".

Según la institución de la Plaza de los Reyes, para su colocación "está previsto que se utilice tecnología de última generación, ya que este sistema de cableado discurrirá enterrado por el fondo marino para incrementar su seguridad a unos a 900 metros de profundidad máxima".

La subestación que, según Red Eléctrica, se prevé ubicar en San Roque, "agilizará" la puesta en marcha de esta conexión eléctrica y garantizará que el cable discurrirá por un fondo marino "con mayor estabilidad sedimentaria y alejado de las zonas de tráfico marítimo de buques".

El proyecto ya está concluido y solamente pendiente de presentación una vez quede registrado durante el próximo mes de noviembre. Las previsiones de ejecución contemplan que esté listo "en 2025".

Debido al el alcance de esta iniciativa, y dado que se trata de una interconexión que afecta a dos regiones, su tramitación ha sido realizada por la Administración General del Estado.