"FALTA DE GESTIÓN"

UGT pide "medidas drásticas y radicales" con Vega y Contreras por el "caos" de la Policía Local

UGT pide "medidas drásticas y radicales" con Vega y Contreras por el "caos" de la Policía Local
Coche patrulla de la Policía local
Imagen de recurso.
El sindicato asegura que el Gabinete de Atestados permanece cerrado hasta "días enteros", que no se hacen controles de velocidad o drogas "desde finales del año pasado", que el parque móvil del Cuerpo está en un estado "lamentable" y que los agentes "carecen de todo tipo de vestuario y prendas de uniformidad".

El Sindicato de la Policía Local de FeSP UGT ha cargado este lunes contra el "caos" y la "desorganización" que a su juicio están generando en el Cuerpo su superintendente, Sebastián Vega, y el director general de Gobernación, Juan José Contreras. "La falta de gestión y planificación ha llegado a límites inauditos: las alternativas llegan tarde y mal, ya que la previsión para la cobertura de determinados puestos, y su lenta tramitación burocrática hacen que duren demasiado tiempo", ha señalado el sindicato, que ha pedido al Ejecutivo de Vivas y a su consejero competente, Javier Guerrero, medidas "drásticas y radicales".

Según los ugetistas, todo ello "desespera" a los polícias, "que se encuentran desbordados ante estas situaciones que para los tiempos que corren son inadmisibles y provocan un notable perjuicio en los puestos de trabajo afectados y colateralmente en el resto de la plantilla".

"La absoluta falta de previsión y la nefasta gestión de las diferentes unidades del Cuerpo repercute tanto en la ciudadanía como en los propios funcionarios y en la gestión de los Recursos Humanos, pese a tener una cobertura de plantilla que ningún jefe anteriormente ha tenido, hay servicios como el Gabinete de Atestados cerrado días enteros, sin atención a la ciudadanía en casos tan graves como accidentes de tráfico, llegando incluso a desatender hasta cinco usuarios durante una tarde, cargando de trabajo al siguiente turno, creándole una situación de desborde a los instructores de diligencias judiciales y de estrés inadmisible, además de tener que sufrir las quejas en primera persona de los ciudadanos que no entienden que un servicio que debe funcionar las 24 horas, 365 días al año, se encuentre cerrado, teniendo que volver otro día", ha ejemplificado.

En un comunicado, FeSP-UGT ha denunciado que "la falta de planificación en la Central de Comunicaciones hace que la carga de trabajo en fin de semana recaiga sobre un solo funcionario, parcheando como siempre este problema con la presencia de un patrullero del ya mermado servicio de Unidad de Seguridad Ciudadana, sin la formación adecuada para gestionar las llamadas de emergencias a través del 112, con la responsabilidad que ello conlleva, ya que la mala gestión de una llamada puede traer consigo consecuencias incluso judiciales para el compañero, y con el consiguiente retraso en atender los requerimientos de la ciudadanía, en algo tan esencial, como es la coordinación y respuesta de todos los servicios públicos a las emergencias requeridas".

Además "existe un abandono total de servicios tan esenciales como los Mercados Central y Real 90, así como el Ceuta Center que carecen de efectivos asignados en el pulmón económico de la Ciudad".

Por si fuera poco, UGT ha criticado que "la falta de recursos materiales también evidencia la desidia y dejadez de la Jefatura ante las necesidades básicas de la plantilla". Los agentes "carecen de todo tipo de vestuario y prendas de uniformidad, situación que se agravará con la llegada del invierno" y la flota de vehículos y motocicletas de la Jefatura está en un estado "lamentable", como los furgones de la UIR, que "no son aptos para la prestación del servicio".

Sin controles de velocidad y drogas desde 2019

"Desde finales del año pasado, no se están llevando a cabo controles tanto de velocidad alcoholemia y drogas, ya que los compañeros destinados a la Unidad de Metrología carecen de elementos como sonómetros, etilómetro evidencial y test de drogas por otra dejación más de la Jefatura, teniendo a los compañeros de dicha unidad realizando labores distintas a las que tienen encomendadas", ha añadido.

Para terminar, la central ha censurado "el trato altivo, déspota y fuera de lugar dispensado en numerosas ocasiones por parte del superintendente a los compañeros y compañeras, que supone una falta de respeto nunca vista antes por parte de ningún jefe anterior, y que mina la moral y desmotiva a una plantilla que no se ve apoyada por su propia Jefatura".

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