UGT ha salido a la palestra para denunciar los "accesos sin control" que llevan largo tiempo produciéndose "en las instalaciones de los embalses de nuestra ciudad", circunstancia que, claro está, obliga a actuar a los vigilantes de seguridad que prestan servicio en los mismos.

Según la organización sindical, la respuesta de "muchos" de los "jóvenes" que, a menudo, se cuelan en las instalaciones, suele ser "agresiva", lo que -en palabras de los ugetistas- "pone en serio riesgo la integridad física de los propios vigilantes".

Dada la evidente lejanía de los pantanos respecto a las zonas urbanas, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado no pueden personarse en ellos -por requerimiento o no- de manera inmediata. La coyuntura ha provocado, recientemente, que un grupo de trabajadores fueran víctimas de un "apedreamiento", así como de "insultos y amenazas".

A este último episodio, hay que sumar el recientemente vivido por "los usuarios del Club Los Delfines", quienes también han sufrido en primera persona los efectos del "vandalismo" de los mismos jóvenes (cortes de amarres, rotura de cristales de vehículos, etc.).

Por todo lo expuesto, UGT ha anunciado públicamente su intención de poner los hechos en conocimiento de la inspección de trabajo. Con ello, el sindicato aspira a que el ente público actúe sobre las "deficiencias en materia" de seguridad.