El Banco de España (BDE) ha convocado a entidades tecnológicas y proveedores de servicios financieros para que participen en un proyecto que quiere empezar a implantar divisas digitales. La razón de este interés en este tipo de monedas viene por querer emitir una que sea interbancaria o de naturaleza mayorista.

Su interés ahora radica en encontrar empresas e instituciones que estén interesadas en participar en este proceso. Han comenzado emitiendo un comunicado a finales del 2022. Las tendencias en la comunidad de criptomonedas muestran cómo este puede ser uno de los grandes eventos del 2023. Visitar esta web es una gran idea para aprender más sobre las divisas digitales en la actualidad.

Qué deben hacer las empresas interesadas

Numerosas instituciones se han mostrado muy favorables y con interés en colaborar. El hecho de que se trate de un organismo oficial causa muy buena impresión, por eso ya están comenzado a solicitar información.

Lo primero que se debe hacer es a principios de año realizar, mediante un formulario, una petición oficial. Se debe hacer ante el propio Banco de España.

La convocatoria explica que se deben adjuntar distintos documentos. Entre ellos los que muestren los medios económicos y materiales que se tienen para que la realización fuera la correcta.

Antes de tomar una decisión final, el Banco de España evaluará las proposiciones y realizará entrevistas presenciales con los interesados, con el fin de poder validar y aprobar su propuesta. Lo que no se ha especificado es el contenido de las entrevistas ni el tiempo de las mismas.

Monedas digitales de banco central

Desde las monedas antiguas hasta las monedas digitales de hoy en día han pasado muchas cosas. El tipo de divisas que la institución monetaria española está interesada en probar no son monedas digitales al uso. Se trata de las conocidas como CBDC por sus siglas en inglés, es decir monedas digitales de banco central.

Este tipo de monedas es una nueva forma de dinero. Que emite el Banco Central de manera totalmente electrónica. El fin es claro y sencillo, facilitar el sistema de pagos. Y es que la sociedad cada vez utiliza más pagos en la modalidad electrónica, y menos en efectivo. Se pretende también mejorar la estabilidad económica.

Este proyecto no tienen nada que ver, y por tanto el Banco español se desvincula, con las propuestas que está desarrollando el Banco Central Europeo para emitir el euro digital. Un proyecto paralelo de la Eurozona, enfocado en las mismas ideas de la institución española.

Aunque todavía no se ha aclarado si finalmente se terminará emitiendo y si esto ocurre, cuando sería.

Lo poco que se ha revelado apunta a que actualmente se encuentra en una segunda fase de investigación que se espera tenga una duración de 2 años en los que colaborará con distintas empresas relacionadas con las finanzas digitales.