La cuenta atrás ya se ha iniciado. El Caballa Rock volverá a desplegar toda su esencia en el auditorio de La Marina dentro de escasos treinta días. Lo hará, para mayor gloria de los más metaleros, al amparo de una abultada nómina de bandas y artistas invitados (nueve, para ser exactos).

Si lo tuyo es el rock and roll (a ser posible, a toda pastilla), la cita es obligada. Si lo único que buscas es llenarte la tripa a mogollón, también; porque sí, "habrá barras de comida y bebida", lo que, en resumidas cuentas, viene a significar que la diversión está más que garantizada.

El festival ceutí de rock por antonomasia inaugurará la que será su sexta edición a las dos en punto de la tarde del próximo de 3 junio -sábado-. La música sonará sin parar durante diez largas horas, esto es, hasta bien entrada la medianoche.

El cantante al que le ha sido asignado el gustoso cometido de abrir la lata es Miguel Rovira. El artista, que lleva largo tiempo cautivando nuestros oídos con su voz y su guitarra, intentará meterse a su público en el bolsillo -de nuevo- a golpe de flamenco. En esta ocasión, Rovira no estará solo: el músico se subirá a las tablas de La Marina en compañía de otros dos profesionales del gremio con la firme pretensión llevar su directo a otro nivel.

La Ruina seguirá la estela de Rovira en lo que a espectacularidad se refiere, pero virando hacia el rock urbano. Según la organización, "sus canciones hablan sobre temas cotidianos: amores, desamores, política, sentimientos personales...". En definitiva, "cualquier cosa que te haga pensar". El grupo, que vio la luz allá por 1991, se ha caracterizado, desde entonces, por crear "composiciones únicas". Juanjo Fernández, Óscar Alba, Carlos Armesto y Chico Palenzuela descubrirán a los asistentes algunas de esas exclusividades.

Los siguientes en tocar serán los chicos de Rata Pendón, una banda originaria de Estepona que se autoencasilla "prostirock". Su apuesta: "Canciones cargadas de guitarras distorsionadas con melodías rockeras y toques de rythm and blus y soul". Los promotores del evento están convencidos de que quienes más van a disfrutar de su actuación son "los aficionados al rock clásico de raíces negras".

The Ticks recogerá el testigo poco antes del cénit del festival. Se trata de una agrupación autóctona formada por seis amigos que, antaño, se reunían en el Dublín y en Fuente Caballo "para tocar, cantar y beber". Las asiduas y alegres reuniones no tardaron en dar paso a los primeros bolos. La aparente buena respuesta del público hizo que los caballas se planteasen llevar más lejos su afición por la música. Y aquí están. "Son un grupo muy divertido en escena; seguro que nos harán pasar un buen rato", aseguran los organizadores.

Acto seguido, será el turno de Espiral, otra banda oriunda que lleva en activo desde el año 2005 y que cuenta tras de sí con cuatro discos grabados (con videoclips incluidos). En palabras propias, su estilo es "el heavy rock de toda la vida, sin artificios innecesarios". Luis Zapater, José Luis Corrales, Antonio Jurado, Rogelio Mateo y Alberto Mateos buscarán deleitar a sus espectadores bajo esa innegociable premisa de autenticidad.

Second dará continuidad al jolgorio con su dilatada experiencia en el sector. La agrupación, fundada en 1997, logró el primer puesto en un prestigioso festival británico al que concurrieron "más de 2.000 bandas". El reconocimiento dio paso a una gira por las principales ciudades de Reino Unido, donde sus componentes arrasaron por doquier antes de dar el salto cual hijos pródigos a nuestro país para incorporar el castellano en sus canciones. Su último disco, Fracciones de un segundo, ha hecho de ellos una auténtica referencia a nivel nacional.

Culto al silencio, otro conjunto ceutí de pura cepa, relevará a Second sobre el escenario del auditorio. Manolo Rodríguez, Sergio Muela, Carlos López y Antonio Mesa llevan desde 1989 simpatizando con la "corriente gótica". A sus espaldas, tiene temas tan icónicos como Nostálgico ayer y Náufrados, temas que, por cierto, les han valido dos podios en el certamen de Pop-Rock de nuestra ciudad.

El algecireño Shalom cerrará las performances grupales; el Canijo de Jerez, hará lo propio con el festival en sí. Marcos del Ojo, al que -dice la organización- "le debemos más de una alegría", lleva veinte años en vanguardia. Del Ojo debutó con Los delingüentes. Tiempo después, llegó a colaborar con celebrities del orden de Kiko Veneno, Albert Pla y Juanito Makandé. Tras su paso por los estrellatos de Bruselas, Ámsterdam, Londres y Nueva York, el Canijo hará resonar su "rumba canalla" en nuestra ciudad para dar carpetazo a este Caballa Rock de auténtico infarto.