“La cena de los cobardes es una fiesta teatral muy aclamada en Francia; con unos ingredientes que van desde la comedia al drama y algún que otro ramalazo de humor. Decía en el subtítulo que es un cóctel explosivo, ya que el cinismo, la crueldad, la falta de carácter, la cobardía, el miedo a la muerte y la pasión por la vida, son una crónica cruel y lúcida de la barbarie ordinaria”, explican.
Una obra que pivota sobre una pregunta:¿De qué somos capaces cada uno cuando el miedo nos acorrala? “El espectador no podrá dejar de identificarse con estos personajes cuando en el grupo de los siete amigos comienza un diálogo amargo, duro, sin piedad ni concesiones. Sin duda esa noche de 1942 todos los invitados lamentarán amargamente haber ido a la celebración. El comandante de la Gestapo exige rehenes y para ello implanta un régimen de terror en la vivienda. La cobardía es el valor de las fauces de las fieras cuando la bondad ha perdido su lugar.
La obra, como es habitual en las compañías locales, pese al trabajo de los actores, la inversión en el decorado y la subvención de la Consejería de Cultura, sólo se representará una vez.