La música y la comida serán las protagonistas de la aportación de la Fundación Premio Convivencia a los actos del Día de Ceuta. El día 6 llegará, como en los últimos años, ‘Nuestros sabores’, la cita con  las tapas de las Cuatro Culturas en la plaza Nelson Mandela y el día 8, en las Murallas Reales, el I Encuentro de Músicas Espirituales.

Tres serán las músicas sagradas que subirán a escena, una bien conocida por los ceutíes, el coro Azzohor de Al Idrissi, los otros dos bien distintos: Soul Connection, una agrupación musical de cantantes y músicos pertenecientes al Coro Gospel de Madrid y la música sufí de Hamza Castro Mevlevi Esamble.

Soul Connection ofrecen una alta calidad musical y puesta en escena al más puro estilo góspel, siempre planteado desde sus raíces afroamericanas. Han actuado en escenarios como el Museo del Prado, la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando (con la presencia de S.M. la Reina Dña. Sofia), el Teatro Nuevo Apolo, Palacio de Congresos del recinto ferial Juan Carlos I y diversos centros culturales de la Comunidad de Madrid. También ha participado en la actuación del 15 aniversario de Vocento en el Teatro Real de Madrid con Music Has No Limits, ante la presencia de SS.MM. D. Felipe y Dña. Leticia.

La formación está compuesta por 30 personas entre las que destaca la presencia de dos artistas de Gospel de talla mundial, que viajarán esos días desde Estados Unidos para estar con ellos en el mes de Septiembre. Los artistas invitados desde USA serán San Franklin Kennedy y Damien Sneed.

Por su parte, el Neyzen granadíno Hamza Castro ha realizado numerosos conciertos a nivel nacional e internacional:  Marruecos, Tunez, Portugal, Francia, Alemania, , Escocia, Italia, Eslovenia, Croacia, India, Turquía…

El Ney es el instrumento por excelencia de la música Sufí, junto con la flauta japonesa (Shakuhachi), el Ney está considerado uno de los instrumentos de viento más difíciles de soplar del mundo.

Se conoce a los mevleví también como derviches giradores porque tienen una ceremonia de danza-meditación, llamada Sema, que consiste en una danza acompañada por música de flauta y tambores. Los danzantes, giran sobre sí mismos con los brazos extendidos, simbolizando "la ascendencia espiritual hacía la verdad, acompañados por el amor y liberados totalmente del ego".