Polémico para unos, implacable para otros: así es Jesús Cintora, uno de los periodistas españoles más combativos (y controvertidos) de los últimos tiempos. El informador, entregado a la escritura en sus ratos libres, se ha dejado ver este frío y lluvioso miércoles de febrero por nuestra ciudad para presentar el que se ha convertido en el más vendido de sus cuatro libros publicados hasta la fecha: No quieren que lo sepas.

No, no se trata de una novela policiaca inspirada en la Gran Bretaña de la época victoriana; la obra se configura -en palabras de su propio autor- como "una reflexión amplia y general de la actualidad política española". Pormenores como las sucesivas crisis sufridas por los grandes partidos de alcance nacional, las denominadas 'puertas giratorias' y la politización de la Justicia encuentran acomodo en las más de 300 páginas que componen el relato.

No quieren que lo sepas vio la luz pública hace ahora casi un año. Tras su puesta a la venta, Cintora dio inicio a una suerte de 'gira' por toda la geografía española para presentar el ensayo. Once meses después, ha sido el turno de nuestra ciudad.

Como todo acto de esta misma índole, el de hoy ha tenido lugar en la sala de usos múltiples de la Biblioteca Pública Adolfo Suárez. Pese a que no era la primera vez que el escritor venía a Ceuta, la expectación ha sido máxima. Más de medio centenar de personas -seducidas por la propuesta de Cintora- han presenciado la exposición al completo.

La obra encuentra su razón de ser en los numerosos exabruptos editoriales protagonizados por el mismo Cintora a lo largo de su dilatada trayectoria profesional (y en las consecuencias que estos han llevado irremediablemente aparejadas). Visto su llamativo título, la pregunta era obligada: ¿quién no quiere que sepamos qué? "Apenas me lo han preguntado a lo largo de los últimos meses", bromeaba Jesús. La libertad de expresión, la censura y las estructuras internas de los grandes medios de comunicación dan respuesta a esa sugerente y acertada incógnita.

A los pocos segundos de hacerse con la palabra, el micrófono del reportero se apagaba de golpe y porrazo. "Ya veis lo que pasa cuando habla Cintora", decía, con cierta sorna. Según el literato, No quieren que lo sepas constituye "un título bastante conceptual que guarda estrecha relación con el reparto del poder y con todo lo que se cuenta".

Cintora no se ha mojado al momento de ser preguntado por algún caso concreto de desinformación de entre todos los acaecidos en nuestro país en lo que llevamos de siglo. "El día a día nos deja constantes ejemplos de las diferencias que existen entre lo que realmente ocurre y lo que nos cuentan", esgrimía. "A veces, se nota quién paga la tinta; ahí es donde suele estar la clave de todo", señalaba.

Acérrimo defensor de la profesión periodística, el veterano informador tiene claro que son muchos los grandes directivos que tratan de manipular a la ciudadanía... aunque no todos: "Hay empresarios del sector de la comunicación que trabajan decentemente con algo tan sensible como las noticias".

Buena parte de la problemática radica, a juicio de Cintora, en la ausencia de espíritu crítico en el público objetivo de la información. "A veces, se pone el dinero en otro tipo de chismes porque interesa tener a la gente distraída y que no piense demasiado", defendía.