“Todo lo que sabemos del amor es que el amor es todo lo que hay”, resumió Emilie Dickinson, consciente de que el amor lo era todo para la mujer porque todo lo demás le estaba vedado. También en la literatura.

En memoria y homenaje a esas artistas en un entorno hostil se celebra cada año el Día de las Escritoras, una iniciativa de la Biblioteca Nacional junto a la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias (FEDEPE) y la Asociación Clásicas y Modernas que, desde 2016, busca reivindicar la labor y el legado de las escritoras a lo largo de la historia a partir de la lectura de fragmentos representativos de sus obras y a la que se ha adherido la Biblioteca Pública de Ceuta ‘Adolfo Suárez’.

En esta ocasión, el Día de las Escritoras se ha centrado en el tema “Amor, mujer y libertad”, algo, esto último, de lo que no ha gozado la mujer a lo largo de la historia, esclavizada por el mito de amor romántico, basado en la posesión, la antesala de la violencia y la dominación. "El día en que una mujer pueda amar, no desde su debilidad sino desde su fuerza, no para escapar de sí misma sino para encontrarse, no para rebajarse sino para afirmarse -- ese día será para ella, como para los hombres, una fuente de vida y no de peligro mortal", auguraba Simone de Beauvoir.

Pero ese día no termina de llegar para odas. Para acercarlo un poco si cabe, veinte mujeres de todas las edades y condición, han leído en la biblioteca veinte relatos de otras tantas escritoras.