La diputada socialista, Elena Mateo, ha afeado este miércoles al Gobierno durante la celebración de la sesión plenaria de control al Ejecutivo correspondiente al mes de diciembre, el enorme retraso que acumula la apertura del polideportivo Díaz Flor. Mateo ha pedido explicaciones al Gobierno y ha insistido a la consejera de Deportes, Lorena Miranda, para que se comprometiera a un nuevo plazo. Miranda ha declinado concretar demasiado y ha expresado su deseo, más que su convencimiento, de que la instalación entre en funcionamiento durante el primer semestre de este año, 2022.

El polideportivo se cerró en 2016, hace casi 6 años ya. La obra comenzó en febrero de 2018 y debía haber estado lista en marzo de 2019. El plazo de ejecución acumula un retraso de 3 años y cuadruplica el inicialmente previsto, a pesar de que en un principio uno de los argumentos del Ejecutivo para optar por la empresa pública Tragsa era precisamente la agilización de los proyectos. Y a pesar del retraso tampoco se conoce sanción alguna a la empresa que ha gozado de visto bueno sin pegas a todas las prórrogas que ha venido solicitando hasta alargar el plazo de ejecución de poco más de un año a los 4 años.

El primer retraso, tal y como ha repasado Mateo lo comunicó la empresa en marzo de 2019. Solicitó entonces 5 meses más. En septiembre-octubre de ese año, tampoco estaba el polideportivo terminado. Pidió entonces prorrogar hasta el 30 de junio de 2020. Tampoco. Gaitán fijo entonces la apertura durante el primer cuatrimestre de 2021. Erró. El PSOE volvió a interpelar sobre el asunto en julio de ese año. Se habló entonces de que la instalación acogería usuarios el mes pasado, ahora de nuevo se alarga la entrada en funcionamiento.

¿Qué queda? Lo mismo que hace medio año, firmar el convenio con la Empresa del Alumbrado para que el polideportivo pueda engancharse a tres centros transformadores y adecentar, urbanizar, los laterales del edificio, según ha explicado Miranda, que se ha excusado en la complejidad administrativa que conllevan esas dos acciones.

Al parecer el equipamiento ya está licitado y se prevé que el Gobierno opte por una gestión mixta de la instalación ante lo que ha protestado Mateo: “No entiendo porque la Ciudad siempre se empecina en externalizar los servicios. Si tenemos personal propio y lo formamos sería más barato”, ha argumentadola diputada socialista.

“Los plazos de las obras no los pongo yo y los trámites son bastante complicados. Ojalá lo tuviéramos mañana y lo estuviéramos disfrutando. Estamos trabajando en ello y no estamos de brazos cruzados”, se ha defendido Miranda

Sobre la gestión mixta, ha defendido la consejera que “es lo mejor. El servicio puede funcionar mejor. Se trata de un pabellón muy grande, complejo, con muchos servicios. Una gestión desde la Ciudad va a ser complicado llevarla a cabo y creemos que la mixta es mejor”.