La Confederación de Empresarios de Ceuta (CECE) se siente ninguneada por el Gobierno. “Nos citan en todos los foros como agentes sociales pero nuestra opinión no vale para nada, el Gobierno ningunea a la Confederación de Empresarios”, lamentaba Jorge Campos mientras sus compañeros de mesa, incluido el presidente Bhagwan Dhanwani, el responsable del Centro Comercial Abierto, Ernesto Valero, y los empresarios y miembros de la directiva Mercedes Araujo y Juan Torres.

Campos se sumó a las reflexiones surgidas en el congreso de economía del Instituto de Estudios Ceutíes y reclamó un plan estratégico para la Ciudad, recordando que de las 35 medidas propuestas en la extinta Mesa por la Economía, “no se ha cumplido ninguna”.

Una reflexión, o un reproche, según se mire, que ha surgido en el balance anual de la Confederación de Empresarios con los periodistas, en una rueda de prensa que se ha convertido en una entrevista colectiva y en la que, además, se ha hecho repaso de la situación económica de la casa. Dhanwani ha alertado de que la crisis ha hecho mella, ha menguado el número de socios y las cuotas no sirven ya casi ni para mantener la estructura de la CECE, que en la actualidad cuenta con seis empleados y que “ha llegado a tener 12”.

Un balance en el que no podían faltar los temas que preocupan a empresarios y sociedad en general: la inseguridad ciudadana y el caos de la frontera. Respecto al primero de los temas, la inseguridad, el empresario Juan Torres señaló que han solicitado a la Ciudad un refuerzo de la vigilancia durante la campaña de Navidad para poner freno a los pequeños hurtos protagonizados por menores. “No entendemos como los Mercedes de lujo de los turistas de alto poder adquisitivo se atascan en la frontera y cada día pasan más delincuentes, como dice el presidente”, ironizó Valero por su parte. Un caos, propiciado en parte por los polígonos del Tarajal, donde se pidió un mayor control para los empresarios que no cumplen con la Ley pero recuerdan además que muchos problemas de la frontera vienen dados por la falta de efectivos y de coordinación de Policía y Guardia Civil que en ocasiones crean el embudo en la frontera “al haber tres carriles de Policía Nacional pero luego sólo uno de la Guardia Civil, o viceversa”, apuntan.

Desde la CECE rechazaron la posibilidad de un cierre de los polígonos del Tarajal, “algo que nunca pedirían los empresarios” y defienden “todos los flujos económicos que se ajusten a derecho”.