El Defensor del Pueblo, Ángel Gabilondo, media con el Gobierno de la Ciudad y con la Dirección General de Migraciones para buscar una solución a la “grave situación en la que se encuentran los trabajadores y trabajadoras transfronterizos en Ceuta tras el cierre de la frontera. 

Así se lo ha adelantado el Defensor en una carta en respuesta a la petición de ayuda de Rachida Jraifi, portavoz de este colectivo que viene manifestándose cada lunes ante la Delegación de Gobierno para llamar la atención sobre su precaria situación, tras casi dos años atrapados en el dilema de volver a su país y recuperar a sus familias o quedarse en Ceuta y mantener el trabajo que los alimenta a todos.

La oficina del Defensor aclara a Jraifi que “se encuentran en trámite distintas actuaciones con las ciudades autónomas de Ceuta y de Melilla, así como con la dirección General de migraciones, en relación con la concesión de célula de inscripción a trabajadores transfronterizos que permanecen en territorio nacional y tienen caducado su pasaporte, al objeto de que puedan prorrogar su autorización de trabajo, así como facilitar dicha prórroga sin exigir documentación marroquí imposible de obtener”. 

Asimismo, los trámites del Defensor van también en otras direcciones, dando traslado a la dirección General de migraciones de la situación general en la que se encuentran los trabajadores y trabajadoras transfronterizos en las ciudades autónomas, solicitando información sobre las actuaciones que se adopten “para evitar la recaída en la irregularidad administrativa y laboral” de los trabajadores que permanecen en las ciudades autónomas ejerciendo su actividad laboral; así como para la regularización de la situación administrativa de aquellos que se encuentren en Marruecos, una vez que se produzca la reapertura de la frontera.