La Fundación SAMU ha emitido un comunicado en el que responde a las acusaciones de UGT de intrusismo en labores de seguridad y de contar con personal sin cualificación para atender a los menores marroquíes acogidos tras la entrada masiva de mayo.  

“Los menores están siendo atendidos en todo momento por personal cualificado, cuyo principal objetivo es velar por su seguridad y tratar de garantizar el bienestar de todos y cada uno de ellos. Desde Fundación SAMU, reiteramos que nunca han sufrido ningún tipo de maltrato por parte de nuestros profesionales, los cuales están realizando un gran esfuerzo para gestionar esta situación de crisis de la mejor forma posible", se defienden insistiendo en que “ningún trabajador de Fundación SAMU ha llevado a cabo labores de seguridad privada, ni ningún otro tipo de actividad laboral para la cual no esté cualificado. Todo ello queda además sustentado por las conclusiones de las inspecciones realizadas por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en nuestros centros, que no han presentado nunca ningún tipo de disconformidad".

SAMU resalta que, desde el inicio de la crisis migratoria en Ceuta, ha tenido que lidiar con diversas hostilidades y acusaciones como las realizadas por UGT, unas circunstancias que lejos de minar nuestro empeño nos han servido como motor para actuar con más determinación. Todo el esfuerzo que estamos realizando desde el pasado mes de mayo, junto con el Gobierno de la Ciudad de Ceuta, al cual reconocemos su labor y los extraordinarios esfuerzos logísticos y económicos que está realizando, tiene como objetivo una única finalidad: garantizar siempre los mejores cuidados y atenciones a los menores".