La consejera de Economía y Hacienda, Kissy Chandiramani, ha entonado el mea culpa sobre los numerosos servicios públicos que se prestan fuera de contrato, con prórrogas de la adjudicación. En este sentido, Chandiramani ha adelantado que tres de los más importantes —los tres de Acemsa: tratamiento de residuos, la EDAR y el mantenimiento de la red— ya están en proceso de licitación desde diciembre, por un valor conjunto de 12 millones de euros.

Chandiramani ha alegado que se trata en su mayoría de servicios especialmente complejos y ha puesto como ejemplo los tres citados: “No ha sido fácil, casi un año discutiendo las diferentes modificaciones”. Pese a ello, la responsable de Hacienda asegura que el área de contratación de la Ciudad funciona “con relativa normalidad”. “Debemos acelerar los procesos todo lo que podamos, tienen toda la razón”, admitía la responsable de las contrataciones, comprometiéndose a la petición del PSOE, autor de la propuesta, a elaborar un informe sobre todos los servicios que se prestan de forma irregular.

La consejera ha insistido en la “farragosidad” de la Ley de contratos que hace que los procedimientos “sean a veces interminables” y se alarguen durante años: “Cuatro veces se sacó el contrato de monitores de natación (del ICD) y cuatro veces lo echó a atrás el juez”.

Desde MDyC se puso sobre la mesa el efecto que esta situación tiene sobre las empresas locales, que ven cómo se retrasan sus pagos, repercutiendo en el salario de los trabajadores, obligando a las empresas a recurrir a la Justicia, lo que aún alarga más el problema. Una idea en la que abundó el portavoz de Caballas, lamentando que estos servicios “están costando más dinero del que debiera, con reclamaciones que nadie sabe qué va pasar con ellas”. El gobierno ha hecho dejación de funciones en la contratación pública”.

Desde Vox se apoyó también la propuesta, aunque se mostró contrario a la posibilidad de revisar los contratos seis meses antes de su finalización, como pedía el PSOE en su propuesta.