El presidente de Ceuta, Juan Vivas, ha recibido al presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, en la Puerta Noble del Palacio Autonómico, con honores de alta autoridad, y como tal ha firmado en el Libro de Honor, como ya hiciera en su día su predecesor al frente de la entidad financiera, Rodrigo Rato. Vivas no ha dudado en pedir todo el apoyo y “la confianza para el tejido productivo y empresarial de Ceuta, un apoyo que Goirigolzarri ha prometido brindar un “compromiso absoluto de financiación con la Ciudad”.

Un apoyo que ya tiene su reflejo en la contabilidad de Bankia en este 2016. Sólo en los dos primeros meses del año el volumen de crédito de la entidad en Ceuta ha crecido un 60 por ciento. Y el volumen total financiado en 2015 supera los 53 millones de euros. “Y es nuestro propósito mantener esta tendencia durante el ejercicio”, ha adelantado Gorigolzarri recordando los lazos que unen a Bankia con la ciudad: “uno de cada tres ceutíes tiene una cuenta con nosotros y tenemos el 25 por ciento de la cuota de mercado”.

Bankia va saliendo poco a poco del agujero, cumpliendo con dos años de antelación el Plan de Reestructuración impuesto por la Unión Europea. “Somos un banco rentable y eficiente”, sostiene, admitiendo que “nada hubiera sido posible sin la confianza de los clientes cuando hace cuatro años estuvimos en situación de vulnerabilidad”.

Por su parte, el presidente Vivas -que lucía una corbata de Bankia en honor de su invitado pero no ha pronunciado ni una sola vez el nombre y, en especial el complicado apellido, de José Ignacio Gorigolzarri- ha agradecido “de forma sincera” el apoyo que siempre ha brindado a la ciudad y le pedía mayor cercanía con los empresarios locales, con quienes después ha mantenido una reunión informal en el Salón del Trono.