TRANSPORTE

El servicio de autobuses urbanos, paralizado

El servicio de autobuses urbanos, paralizado
autobus pasajeros
Imagen de archivo.

El servicio público de transporte en autobuses urbanos ha dejado de prestarse este martes, segundo día de la fase 1 de transición hacia la "nueva normalidad" en Ceuta porque los aproximadamente cincuenta empleados en alta laboral de la plantilla de su concesionaria, la empresa "Hadu-Almadraba", no están dispuestos a trabajar con peores condiciones salariales que sus veinte compañeros incluidos en expediente de regulación temporal de empleo (ERTE), que tienen garantizado por el Estado un 70% de sus sueldos (salvo los transfronterizos, que no carecen de derecho a nada).

Los que siguen trabajando solo han percibido de la compañía por la labor desarrollada en marzo mil euros por cabeza y se han plantado mientras la Ciudad, que seis meses después de que expirase la adjudicación de medio siglo de duración aún no ha publicado la nueva licitación, sigue analizando cómo satisfacer a la empresa al margen de los 350.000 anuales que ya le da directamente para reducir el precio de los pasajes para colectivos vulenrables como jubilados, desempleados, jóvenes, etcétera.

Cada conflicto económico de la adjudicataria se ha gestionado de forma simiar durante años: un recorte en los condiciones laborales o retributivas de la plantilla se traduce en anuncios o movilizaciones que, a su vez, llevan al Gobierno a abrir la cartera para, por una u otra vía, sufragar la resolución del enfrentamiento.

Esta vez el colapso sí parece estar justificado, pues la prestación se ha quedado sin la línea de autobuses que unía la frontera con el centro y que representaba, según datos de la empresa, "aproximadamente el 40% de la recaudación total".

"El déficit generado por el resto de las líneas (obligatorias pero deficitarias) era “compensado” con los ingresos del trasiego de la frontera y las ayudas de la Ciudad (en torno a 350.000 euros), pero el nuevo escenario introduce un factor de desestabilización de importancia determinante, ante el que sólo caben tres soluciones: una considerable subida de las tarifas que sería injusta para la ciudadanía y en especial para los sectores más vulnerables; una reducción de las líneas operativas (y de la plantilla) que supondría un empobrecimiento del servicio y un incumplimiento de la obligación legal de la Ciudad; o arbitrar anualmente un sistema de subvenciones por parte de la Ciudad de difícil encaje jurídico y difícil explicación social", ha radiografiado el panamorama CCOO, que ha reclamado la municipalización inmediata del servicio a través de alguna empresa municipal.

El servicio de autobuses urbanos, paralizado


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