Apenas un año y medio después de su inauguración, las dos aulas nuevas del CEIP Ortega y Gasset, el primer paso de un proyecto que debía incluir dos plantas por encima, han vuelto a hacer aguas con las lluvias que caen sobre Ceuta desde hace una semana de forma casi ininterrumpida.

Hasta ahora no ha habido que suspender las clases, como en noviembre, pero 27 alumnos de 8 y 9 años, los de la clase 3ºB, estudian en aulas con cubos para recoger las goteras y por las que debe pasar cada mañana un operario para retirar las precipitaciones acumuladas en el techo. Alrededor, el verdín comienza a tomar posiciones y las humedades proliferan por doquier, según han denunciado indignadas varias madres de estudiantes.

La Dirección Provincial del Ministerio de Educación cuenta con que, aprovechando las vacaciones de Semana Santa y 'semana blanca', que comenzarán la próxima semana, la constructora de las dependencias, "que todavía están en garantía", vuelva a actuar sobre ellas.

Según han explicado fuentes del centro a Ceutaldia.com, los trabajos realizados en noviembre se han revelado poco efectivos, según parece debido a un problema con los materiales de obra utilizados.

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