El proceso de escolarización para el próximo curso ha entrado en su segunda fase una vez publicadas las listas provisionales de admitidos y excluidos y, el pasado viernes, las definitivas. Los cambios introducidos en las del Colegio Concertado (CC) La Inmaculada derivarán presumiblemente en media docena de reclamaciones ante la Dirección Provincial Ministerio de Educación, que será la encargada de resolver sobre su procedencia o no en base a la docmentación de los expedientes y los informes que en su caso recabe de la Ciudad sobre la aplicación de la baremación (domicilio familiar en la zona de influencia, básicamente) en el centro, con 50 plazas disponibles y 63 solicitudes recibidas.

La Orden que regula la admisión de alumnos establece una primera fase que va desde que se publican las listas provisionales hasta que salen las definitivas, el viernes pasado, con tres días en medio para formular reclamaciones ante los colegios. En el caso de los centros concertados las decisiones que sobre admisión adopten sus titulares pueden ahora ser objeto de reclamación por los interesados en el plazo de un mes ante el director provincial de Educación, cuya resolución pondrá fin a la vía administrativa. Después quedará la judicial.

Cuando dicha reclamación se presente ante el titular del centro concertado, éste deberá remitirla a la Dirección Provincial del Ministerio en el plazo de tres días “con su informe y con una copia completa y ordenada del expediente”.

Una vez conocidas, el viernes pasado, las listas definitivas de admitidos, los directores de los centros deben remitirlas a la Comisión de Garantía de Admisión, así como las solicitudes de aquellos alumnos que no hayan obtenido plaza en el primero de los colegios solicitados junto a la documentación preceptiva.

La Comisión dará a conocer esta semana el listado de los centros que tienen vacantes para que las familias soliciten nuevo centro y hasta el próximo lunes se extiende el plazo para publicar el listado definitivo de estudiantes asignados a los centros en segunda y siguientes opciones.

Doce son los centros que recibieron durante el periodo ordinario de presentación de solicitudes más peticiones que vacantes disponibles: todos los colegios concertados y seis públicos, los CEIP Ortega y Gasset, Mare Nostrum, Vicente Aleixandre, Reina Sofía, García Lorca y Lope de Vega.

La existencia de hermanos matriculados o padres, madres o tutores legales trabajando en el colegio de preferencia y que el domicilio familiar (entendido como “en el que vive habitualmente el alumno”) esté situado dentro del área de influencia del centro solicitado son los aspectos que más puntos otorgan, ocho, en el proceso de escolarización. A continuación (6 puntos) se barema que el lugar de trabajo de uno cualquiera de los padres, madres o tutores legales, esté situado dentro del área de influencia. Si el domicilio o el lugar de trabajo se ubica en zonas “limítrofes” solamente se conceden dos puntos.

"Conciencia"

La escolarización en ‘La Inmaculada’ ya fue objeto de controversia el año pasado después de que, con tres años de demora, la Sección Tercera de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de Sevilla del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA) ratificase la nulidad de la resolución dictada en 2013 por la Dirección Provincial por no ser conforme a derecho.

Su sentencia obligó a rebaremar las solicitudes de escolarización de 7 alumnos que habían sido admitidos en ese colegio después de haberse puesto de manifiesto, mediante presentación de informes, las irregularidades existentes en los certificados de empadronamiento que aportaron y que les concedieron puntos adicionales clave.

En base incluso a investigaciones de detectives privados, tanto el Juzgado de Primera Instancia como el TSJA consideraron probado que las viviendas en las que supuestamente vivía el alumno según la documentación presentada para la escolarización no se correspondía con la realidad.

Como resultado de la revisión, cinco niños debieron dejar sus puestos escolares y fueron trasladados a otros centros. Desde su llegada a la Dirección Provincial, León Bendayán ha pedido a las familias “conciencia” para no intentar triquiñuelas que, a la corta o a la larga, pueden ser perjudiciales sobre todo para los niños.