Pedro García Aguado, el 'Hermano Mayor', campeón olímpico en 1996 en Atlanta, campeón del mundo dos años después, 565 veces internacional, 7 veces campeón de liga, 6 veces campeón de la Copa del Rey..., llegó a Barcelona con diecisiete años junto con su mejor amigo, el malogrado Jesús Rollán, en 1986, de la mano de Toni Esteller, para incorporarse al Club Natació Catalunya. Fue a partir de entonces, viviendo en una residencia, lejos de su familia y sin ningún control, cuando Pedro se dedicó a entregarse en cuerpo y alma al deporte… Y a los excesos.

En 2003, oficialmente adicto, tuvo que abandonar su carrera como deportista de élite para ingresar en una clínica de desintoxicación. Totalmente recuperado, se ha formado en Programación Neurolingüística y entrevista motivacional, conocimientos que ha podido aplicar durante sus dos años como asesor de terapias familiares en el mismo centro en el que estuvo ingresado como paciente.

Ahora, además de su vertiente televisiva, recorre el país ofreciendo conferencias sobre motivación, liderazgo y trabajo en equipo, y comparte su experiencia en colegios e institutos para que los jóvenes adquieran conciencia de riesgo y conozcan las consecuencias del consumo de alcohol y otras drogas.

Su itinerario le ha traído este miércoles a la ciudad autónoma, donde se ha encerrado durante dos horas con medio centenar de alumnos de Secundaria en el Auditorio del Revellín para celebrar juntos una sesión de 'Kliquers' de la mano de la Fundación 'Lo que de Verdad Importa' y el programa 'Ceuta Te Enseña'.

"Los jóvenes de hoy han perdido la capacidad de saber esperar, de ser conscientes de que las cosas llegan en su momento a base de sacrificio, y de manejar la frustración, algo que ya no hacen de manera natural", ha explicado García Aguado en rueda de prensa. "Nosotros en 1992", ha recordado la trayectoria de la fabulosa selección española de waterpolo de la que formó parte, "ganamos la medalla de plata y tuvimos que trabajar y esperar otros cuatro años para, en Atlanta, ganar el oro... Ahora dile a un adolescente que espere cuatro años para tener el iPhone".

"Que sepan lo que les va a pasar"

El ex jugador de élite no maneja un discurso adoctrinador ni de reprobación, sino informativo: "Esto", ha resumido qué es 'Kliquers', "es un acto psicopedagógico para hacer 'click' en los jóvenes, para que se revelen como los de antes, contra los empresarios de la noche que les meten como ganado en un sitio como el 'Madrid Arena', para que no hagan determinadas cosas, pero no diciendo simplemente que no lo hagan, sino también lo que les va a pasar si lo hacen".

A juicio de García Aguado "no se trata de que los jóvenes no puedan conseguirlo todo, que pueden si se esfuerzan, sino de que sepan manejar la frustración, algo que quizá sus padres no han sabido hacer diciéndoles a todo que sí".

Duras a veces, con sentido de humor en otras fases, las sesiones de 'Kliquers' resaltan la valía del comportamiento asertivo (respetarse a si mismo, respetar a los demás; ser directo, honesto y apropiado; mantener el equilibrio emocional; saber decir y saber escuchar) frente al agresivo y al pasivo, comportamientos que en muchas ocasiones derivan de "inseguridades".

"A través de mi experiencia personal, explicamos lo que puede pasar a quienes hacen botellón o a quienes ser los mayores 'narcos' del mundo", ha reseñado García Aguado. La Fundación intentará, además, con la Consejería de Educación poner en marcha en Ceuta por primera vez en todo el país un programa de revisión de los resultados del paso de 'Kliquers' por la ciudad.