El Gobierno de la Ciudad parece estar abocado a tener que arrancar el próximo curso en septiembre (2022-2023) con menos plazas en la educación de 0 a 3 años y no sin soportar un importante volumen de ruido y problemas. Según ha reconocido este lunes de forma pública el consejero de Educación, Carlos Rontomé, a preguntas del diputado de Ceuta Ya!, Mohamed Mustafa, a la que parece ya segura externalización en la gestión de la Guardería Nuestra Señora de Africa se va a sumar el inminente cierre de la guardería privada Solete.

Rontomé ha reiterado este lunes en el Pleno las explicaciones públicas que ya ha venido dando desde que las madres de la guardería del Morro hicieran público su descontento por la externalización (modelo Pecera) de la guardería pública no sin temer que pudiera haber un cierre, tal y como informaciones trasladadas en algunas reuniones entre responsables de la Consejería y trabajadores del centro dejaron entrever. La razón de la externalización la ancla Rontomé en la reforma laboral que ha limitado el margen de maniobra del sector privado, pero también del público, para realizar contrataciones temporales.

Así, el Gobierno ve imposible cubrir plantilla suficiente en el morro para atender el centro y opta por trasladar a ese personal a la Escuela Infantil de Juan Carlos I, completar esa plantilla, también con carencias, y dejar la gestión de la guardería en manos de una empresa privada.

En la actualidad la Ciudad es responsable de 364 plazas de educación de 0 a 3 años, repartidas así: 160 en la Pecera, 142 en Juan Carlos I y 62 en la Guardería de África. Además hay otras más de 200 plazas concertadas.

Pero esas parece que menguarán el próximo curso. La escuela infantil Solete está abocada al cierre inminente, según ha desvelado Rontomé este lunes. Y además tira la toalla al reconocer que el Gobierno no puede hacer nada más.

El problema aquí es inmobiliario. La propiedad del edificio en el que está ubicada la guardería ha decidido venderlo. La guardería ha logrado que les dejen terminar el curso porque en un principio la fecha de salida planteada por los propietarios era abril. Pero ¿después qué? Después la solución se antoja imposible.

Rontomé ha relatado que él mismo había mantenido reuniones tanto con la parte vendedora como la compradora para intentar que dieran una prórroga y más tiempo a la escuela infantil para acomodarse en otras instalaciones. No hubo éxito en la gestión.

La empresa de la escuela infantil busca local para trasladarse, pero también sin éxito hasta la fecha dado que necesitan unas características de espacio bastante determinadas. Como mucho, Rontomé ha augurado que podrán acomodarse en un nuevo local para pasar a ser guardería, pero ha puesto en seria duda que logren acondicionar algo en el tiempo que les queda que les permita renovar la validación de categoría de escuela infantil por lo estricto que es el Ministerio al respecto. Esto significará casi con total seguridad que el curso arrancará con menos plazas en la ciudad en la educación entre 0 y 3 años.

A esa foto, Rontomé ha añadido un detalle más, las presiones por parte del Ministerio desde hace tiempo para que la Ciudad cierre Nuestra Señora de África. El Ministerio quiere amplir las instalaciones del instituto anexo.

Esa situación no se va a dar de momento. Tampoco la ciudad va a contar con una nueva escuela infantil en corto plazo. A pesar de que como le ha recordado Mohamed Mustafa a Rontomé llevan anunciando su construcción desde hace años. No será hasta ahora, cuando el Estado ha habilitado fondos de forma concreta para la construcción de una nueva Escuela Infantil que como mínimo deberá contar con 191 plazas, todo con cargo al Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (MRR). El presupuesto es de casi 3 millones de euros y Rontomé prevé que se eleve. Rontomé ha dejado este lunes clara su apuesta porque la nueva escuela vaya en el campo exterior, pero también que aún quedan cursos para que crucen sus puertas los primeros alumnos.

“Nos tienen acostumbrados a que se incide en la importancia de la educación, sin embargo sus palabras no se corresponden con sus hechos. Sus palabras están radicalmente en la dirección opuesta a su praxis política”, ha afeado Mustafa a Rontomé.

El localista ha recordado que la competencia en esta etapa educativa la tiene en exclusiva la Ciudad Autónoma y que “de las dos escuelas que recibimos en la transferencia tenemos una y media prácticamente”.

Para Mustafa la externalización de la que habla el Gobierno es un “eufemismo de privatización” y ha vaticinado que una vez más “el beneficio social acabará dinamitado y primará el económico. Cuando la empresa tenga que elegir entre beneficio social y económico, ¡oh sorpresa! Elegirá el económico”.

Rontomé ha ensayado el discurso que previsiblemente mantendría poco después del Pleno en una reunión prevista con las madres de la guardería de África, para dejar claro que la gestión de esas plazas no va a afectar al futuro de los niños ni de las familias y que van a poder seguir en el centro, sólo que ya gestionado por una empresa y no por la Ciudad de forma directa.