La Dirección Provincial del Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP) y los directores de todos los colegios de institutos de la ciudad han abordado este lunes por videconferencia cómo plantear el último trimestre del curso, el primero a distancia y presumiblemente sin clases presenciales por la crisis del coronavirus. Si al nivel nacional se cifra entre un 12% y un 15% del alumnado la tasa de estudiantes 'desconectados', en Ceuta, sobre todo en algunos centros, ese porcentaje es muy superior.

Aunque ya está más o menos claro que de aquí a finales de junio solo se avanzará materia en segundo de Bachillerato y en Formación Profesional y que las notas del segundo trimestre, que se pondrán a disposición de las familias durante esta semana vía 'Alborán' o por medios físicos, serán la base fundamental de las de fin de curso, la Administración y los centros han acordado redoblar esfuerzos para intentar sacarle el máximo provecho a los dos meses largos que se avecinan.

Ambas partes han acordado identificar a los estudiantes más perjudicados por la 'brecha digital', ya sea por falta de herramientas informáticas en casa o por carecer de conexión a Internet. El primer grupo sería el más fácil de ayudar y para ello se ha planteado la posibilidad de prestarles las tabletas y ordenadores portátiles de que disponen los colegios e IES en sus instalaciones, en algunos casos en un número abundante. Si fuese preciso, la Dirección Provincial se plantea pedir más recursos al INTEF.

La ausencia de conexiones en los hogares a la Red es más difícil de subsanar a corto plazo. Entre las ideas que se han barajado está que la Ciudad promueva cobertura inalámbrica gratuita en las barriadas con mayores ratios de alumnado excluido de Internet.

Cruz Roja empezó la semana pasada a repartir las 84 tarjetas SIM de 40 Gbs mensuales por línea adjudicadas por el Ministerio a estudiantes locales de Bachillerato y FP con dificultades para contribuir a que puedan “continuar su formación de manera telemática durante el Estado de Alarma”. La Dirección Provincial hizo una primera asignación en función del número total de estudiantes y de becados de los institutos y cada IES las ha adjudicado nominalmente a alumnos.

La escolarización, a finales de mayo o principios de junio

La crisis de la COVID-19 también ha afectado a los plazos del proceso ordinario de admisión de alumnos en centros educativos para el próximo curso, que inicialmente se iba a abrir el 29 de abril. A falta de concreción por parte de los Servicios Centrales del MEFP, las fechas definitivas serán "a finales de mayo o durante la primera quincena de junio", calcula el director provincial, Javier Martínez.

Antes o después, la Administración asegura que las familias dispondrán de "dos semanas" para presentar las instancias, algo que se intentará que se haga "sobre todo por vía telemática, aunque quienes carezcan de recursos para conseguirlo tendrán también canales presenciales para el mismo propósito".