​“Que nos quiten lo bailao´” es un Proyecto de Centro en colaboración con la Fundación Yehudi Menuhin España, mediante el Programa MUS-E Inclusión, que persigue la mejora del rendimiento académico a través del trabajo desde las Artes para favorecer la integración social, educativa y cultural del alumnado y sus familias, además secunda los planes más relevantes del IES Almina.

En primera instancia, coopera con el Plan de Hábitos Saludables, incidiendo gracias a la danza en la práctica recreativa del movimiento, de hecho, el baile puede ser considerado una actividad expresiva, sin embargo, no debemos limitar a esta acepción su trabajo en el ámbito educativo, ya que debe ser un medio más para conseguir una educación integral del alumnado, fomentando a través de él, el conocimiento,aceptación y dominio del propio cuerpo, favoreciendo además su relación con el mundo que le rodea, es decir formándolo tanto desde el punto de vista motórico como desde el socioafectivo.

​En efecto, Natalia Cabezón, artista Mus-e que desarrolla las sesiones asignadas a la danza en el Almina, se basa en múltiples dinámicas que implican mucho gasto energético realizado de manera divertida, son ideales como medio para eliminar tensiones acumuladas, que de otra forma podrían encauzarse negativamente, siendo fuente de conflictos emocionales. La eficacia de este ejercicio, parece radicar en su poder para cambiar la condición fisiológica provocada por el estado de ánimo negativo, ya que pone al cerebro en un nivel de actividad incompatible con el estado emocional que lo embarga.

Así, implementa al Plan de Convivencia del instituto, incluso añade la posibilidad de experimentar el trabajo cooperativo; el adolescente siente cierta predilección por las actividades grupales porque le permiten descargarse de su inseguridad para fundirse en el grupo. Durante la danza, los participantes se hallan en estado de perfecta socialización al actuar como un organismo único, pudiendo promoverse relaciones humanas de tipo valioso.

​Este proyecto de innovación educativa activa concienzudamente el Plan de Igualdad del Instituto situado en Villajovita, sin duda la música y el baile resultan transmisores de cultura, no obstante, desde una aplicación de la perspectiva de género en todas las actividades realizadas se permite una reflexión sobre la erradicación de connotaciones sexistas y la prevención de violencia de género; una máxima del Proyecto es que el grupo está compuesto por alumnos y alumnas, y jamás se establecen roles o bailes diferenciados en función de su sexo.

​Especifica Ken Robison, experto mundial en educación, que bailar en la escuela es tan importante como aprender matemáticas, desde nuestro centro no nos atrevemos a certificarlo pero sí a ponderar algunos beneficios de la danza como la mejora en la aceptación del propio cuerpo, del proceso de socialización y el desarrollo del sentido estético y creativo.