Un grupo formado por diez personas de origen subsaharino ha llegado a Ceuta a primera hora de la mañana de este jueves a bordo de una embarcación tipo patera con la que han alcanzado la playa de La Almadraba, donde la Guardia Civil ha procedido a la detención del súbdito marroquí que supuestamente ejercía las labores de patrón como presunto autor de un delito contra los derechos de los ciudadanos extranjeros.

Según han explicado fuentes de la Comandancia local de la Benemérita, las unidades desplegadas en tierra han activado al Equipo de Respuesta Inmediata ante Emergencias (ERIE) de Inmigración de Cruz Roja para someter a los indocumentados a una primera revisión sanitaria tras la que no ha sido necesario el traslado de ninguno de ellos al Hospital.

Los migrantes irregulares son ocho nacionales de Guinea Conakry (cinco varones y tres mujeres) y dos sudaneses (una fémina) que, según ha informado la institución humanitaria en un comunicado a los medios, presentaban buen estado de salud.

El grupo ha sido trasladado a dependencias policiales para la apertura de los preceptivos expedientes sobre su situación administrativa en España como paso previo a su ingreso en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) local, cuyo nivel de ocupación se sitúa ahora en entorno de su capacidad máxima operativa, fijada en 520 plazas.

Un total de 111 extranjeros han conseguido acceder a la ciudad autónoma irregularmente a lo largo del mes de junio, tanto por la vía marítima como saltando el doble vallado fronterizo u ocultos en dobles fondos practicados en vehículos para atravesar los controles aduaneros del Tarajal.