Aunque la consejera de Medio Ambiente y máxima responsable de Obimace, Yolanda Bel, aseguró que el Gobierno contaba con toda la documentación para demostrar que no había ninguna irregularidad, la Inspección no opina lo mismo. De hecho, en todos los aspectos investigados se han encontrado deficiencias.

En el primer apartado, el de materia laboral, la Inspección indica que en el contrato de trabajo no se especifica la obra o servicio que constituye el objeto, ni se señala la modalidad. La causa del contrato se muestra tan sólo en el apartado destinado a la modalidad de eventual que indica "lo propio de su categoría". Hechos que según el organismo suponen una infracción en materia laboral, por lo que levanta acta.

El segundo apartado es el de prevención de riesgos laborales no relacionados causalmente con el acccidente de trabajo. La inspección indica que el parte de accidente de trabajo fue remitido por Obimace el 20 de mayo, diecisiete días después del suceso, y cinco más allá del plazo dictaminado por la ley, por lo que se produce una nueva infracción por la que se levanta acta. Además, en la visita que la Inspección realiza a las instalaciones de Obimace en compañía de su gerente, Alberto Solano, y de su administrador, Gregorio García Castañeda, se descubre que el vehículo que conducía el fallecido no contaba con cinturon de seguridad, por lo que la empresa puso "en peligro la integridad física del trabajador". Esta circunstancia supone una nueva acta infracción, y además la Inspección requiere a la empresa que subsane la deficiencia del vehículo.

El tercer apartado hace referencia a la prevención de riesgos laborales relacionados causalmente con el accidente, y contiene quizás los hechos más graves de todos. Y es que según las investigaciones y los documentos analizados, la Inspección indica que el accidente se produjo cuando el trabajador introdujo la cabeza entre el bastidor exterior de la cabina del conductor y el volquete del dumper, cuando se encontraba en posición de carga, precipitándose sobre el fallecido. Los motivos no son conocidos porque no hay testigos oculares, aunque se constatan dos infracciones. La primera es que la empresa no ha evaluado el riesgo que tiene la utilización de un dumper. Cualquier operación en la que el operario tuviese que colocar la cabeza en esa parte del vehículo obligaría a llevar una protección. Además, el trabajador no tenía formación "suficiente, adecuada y específia en prevención de riesgos laborales para el manejo del vehículo dumper que produjo el accidente". Tampoco se le había informado sobre los riesgos que conllevaba ese equipo.

Todos estos motivos son los que llevan a la inspección a dictaminar una causa entre la falta de prevención y el fallecimiento. La Inspección de Trabajo ha iniciado un expediente de responsabilidad por falta de medidas de seguridad salud en Obimace, por lo que propone una recargo de las prestaciones del 40% a cargo de la sociedad municipal. Por último, la Inspección propone la suspensión del procedimiento sancionador por la existencia de diligencias previas en el Juzgado de Instrucción número 5 de Ceuta.