Un año después de su suspensión, la Ciudad Autónoma y la Delegación siguen dándole vueltas a sus "contactos" con empresas aéreas para restablecer las conexiones en helicóptero entre Ceuta y la península. La opción de INAER parece, a juzgar por las últimas explicaciones de Vivas, agotada. El presidente ha desvelado que esa compañía no solo quería "comercializadora" sino un socio que asumiese también el riesgo del negocio.

"Esas líneas son fundamentales aunque no absorban a una gran cantidad de pasajeros porque diversifican las formas de transporte desde la ciudad y dan sentido a los helipuertos de Ceuta y Algeciras", ha recordado Vivas, quien ha explicado que INAER solo está dispuesta a poner aparato, tripulación y permisos. El riesgo de perder dinero debía asumirlo otra parte. Y no ha aparecido.

Así las cosas, como tantas veces, el líder del Ejecutivo local ha dicho que hay "alguna" compañía interesada cuyo nombre no puede revelar. "Este no es un negocio que parezca poder dar un gran margen de beneficio pero que sí puede ser rentable", ha aventurado, "si se introducen opciones añadidas como ofrecer vistas aéreas de Ceut, un lugar de encuentro único entre dos mares y dos continentes".

Ante esa perspectiva, tanto la Delegación como la Ciudad están dispuestas a dar "todo el apoyo" para agilizar la concesión de licencias si alguien da el paso y, en el caso de la Administración local, para inyectar dinero a cambio de que se atienda alguna "necesidad social" como, en el caso de Cathelicopters, se pactó a cambio del transporte de pacientes oncológicos al otro lado del Estrecho.

Vivas confía en que, para bien o para mal, haya noticias más certeras en "20 ó 30 días".