“No es un lujo sino una necesidad”, simplificó Rocío Rodríguez, la directora de las obras que la sociedad pública Acuaes desarrolla y desarrollará en la Ciudad, en relación con la planta de secado de fangos cuya construcción se prevé se adjudique el próximo martes. No es habitual que una Estación Depuradora de Aguas Residuales cuente con una planta de secado de fangos integrada, pero en Ceuta desde el primer momento pareció una necesidad.

Y así se hará. El “horizonte” es de unos 15 a 18 meses a contar desde el martes. Se adjudicará la construcción, se darán dos meses para los replanteamientos antes de que las obras comiencen y se tendrían que acabar sí o sí antes de que concluya 2015 para cumplir con el periodo de prórroga de la programación de los Fondos de Desarrollo Regional (FEDER) Europeos de los que se nutre el proyecto .

Y a partir de que la planta comience a funcionar, pasarán muchas cosas, y todas buenas para la economía de las cuentas públicas de la ciudad, también para la de alguna empresa privada local, como la que explota el vertedero autorizado para inertes y para el medio ambiente y la calidad de vida de los ceutíes.

Básicamente las cerca de 10.000 toneladas de fangos que produce la EDAR de Santa Catalina en un año quedarán reducidas a unas 2.300 de residuo seco inerte gracias al proceso de secado térmico al que se someterán los fangos que son en su mayoría, en un 80 por ciento, agua. Una cantidad suficientemente pequeña por para que se pueda terminar de eliminar o recolocar en Ceuta sin necesidad de que sea transportada a la península, tal y como sucede ahora con los fangos con un volumen mucho mayor.

El ahorro que se prevé es de unos 570.000 euros anuales, según ha explicado el propio presidente Vivas que este jueves mantuvo una reunión junto con varios miembros de su gobierno y múltiples responsables de Acuaes.

Es el dinero, la enorme cantidad de dinero, que cuesta transporta esos fangos a la península. Una necesidad y no un lujo, en otras plantas peninsulares el transporte de los fangos hasta estaciones de secado térmico sale mucho más económico y no hacen recomendable una planta integrada, como será la de Ceuta. Algo que Acuaes comprendió desde el primer momento y que sigue comprendiendo más aún hoy a juzgar por el discurso pre claro de su máxima responsable, la directora general, Aránzazu Vallejo.

y no sólo eso el secado de los fangos ahorrar dinero a las arcas públicas y consumo de combustible en su transporte. Además la estación de secado se nutrirá del biogas que genera el tratamiento de las aguas fecales. Energía que hasta ahora se desaprovecha en parte y que con la entrada en funcionamiento de la nueva planta se aprovechará en su totalidad, y recudirá el consumo necesario de energía de una forma considerable, hasta el 30 por ciento del total, para el mantenimiento de la nueva planta de secado, según los datos aportados por Vallejo.

Quizás esta planta es el proyecto más atractivo que tiene Acuaes en el horizonte en Ceuta, pero no el único. Así la reunión entre la sociedad y la Ciudad Autónoma ha servido para repasar lo hecho, 35 millones de euros de inversión (27,8 para la EDAR y otros 7,5 para la planta de secado térmico y otros pequeños proyectos como la mejora de la red de saneamiento en Pozo Rayo, el Sarchal y San Amaro); y también los que se pueden afrontar en el futuro. En ese apartado el presidente Vivas ha pedido a la sociedad que estudie la posibilidad de acometer de forma decidida las obras para completar la renovación total del saneamiento y el abastecimiento en el Príncipe. Algo que no se ha negado a estudiar la responsable de Acuaes que ha recordado el carácter instrumental de la sociedad de cara a mejorar la calidad de vida de la ciudadanía.

El presidente Vivas ha aprovechado la reunión y el balance de la misma para repasar las obras de su Gobierno en lo que tiene que ver con el ciclo integral del agua, casi como si el que estuviera en campaña fuera él mismo y no Rocío Salcedo. Así ha repasado los 60 millones de euros invertidos en los últimos años para potenciar la producción de agua que en breve se llegará a los 31.000 metros cúbicos y la mejora en la red de abastecimiento para evitar fugas y reducir el consumo hasta a los 21.000 metros cúbicos. También en la red de saneamiento y la culminación de la EDAR de Santa Catalina con su estación de secado térmico y la estación de bombeo que se prevé construir también con Fondos Europeos y que unirá toda la red a Santa Catalina.

El presidente al igual que Vallejo subrayaron la importancia de la obra de la EDAR para cumplir con la normativa europea y dejar de verter aguas residuales al mar y por tanto contaminar. Aguas que ahora son tratadas para su reaprovechamiento y que reducirán de forma notabilísima su impacto ambiental con la entrada en funcionamiento de la la estación de secado térmico.