La consejera de Medio Ambiente, Yolanda Bel, ha presentado este miércoles junto a un técnico de Obimace y al encargado de la empresa ‘Sin límite vertical’ el programa de retirada de residuos y mantenimiento de acantilados que ha puesto en marcha el Gobierno ceutí con un presupuesto de 183.766 euros y un plazo de ejecución de seis meses. Según ha destacado la consejera el proyecto constituye “la primera zonificación integral del litoral de la ciudad para la retirada selectiva de residuos de todo tipo de los acantilados ceutíes y el desbroce manual de especies exóticas e intrusivas”.

El programa ha dividido la costa sobre la que se actuará en siete zonas: Hacho Norte (desde la playa de San Amaro hasta el dique de Santa Catalina, con 86.000 metros cuadrados de superficie); Las Cuevas (hasta la Sirena de Punta Almina, 171.000 metros); Punta Almina (que llega hasta el castillo del Desnagirado, 120.000); Desnarigado (que abarca hasta la cañada de Fuente Cubierta, 66.800); Sarchal (hasta la antigua cárcel de mujeres, 37.000); Recinto (hasta Fuente Caballos, 162.800) y Chorrillo (desde el Ángulo hasta Juan XXIII), 52.100).

La superficie total sobre la que se actuará es de 697.673 metros cuadrados y la cantidad de basuras que se retirará se prevé que sea “ingente”. Sólo en el Chorrillo, donde comenzaron los trabajos en octubre, se han encontrado dos toneladas y media de residuos sólidos urbanos, 4,5 de inertes y 880 kilogramos de restos de poda y maderas.

Bel ha reconocido que algunos de los acantilados en los que se trabajará se limpiarán “por primera vez desde hace años” y ha hecho un llamamiento directo a la ciudadanía para que se “sensibilice” con la problemática de los vertidos irregulares. “La Ciudad hace su trabajo y limpia los acantilados, pero de nada sirve este desembolso de dinero de todos si después hay gente que tira las basuras en cualquier vaguada”, ha avisado.

La empresa ‘Sin límite vertical’, adjudicataria del contrato, empleará a nueve trabajadores para el desarrollo del proyecto, que incluye la retirada de residuos tanto por la vía terrestre como por la marítima, y que prestará especial atención a especies vegetales en riesgo de extinción como el 'limonium' o la 'patella ferruginea' y a "minizar las molestias" que pueda causar a la migración de aves como la pardela cenicienta.

Sanciones “millonarias”

La consejera ha adelantado a preguntas de los periodistas que su línea de acción política para erradicar los vertidos no prioriza la imposición de sanciones, pero que aquellos que vulneren la legislación vigente y la normativa local deberán hacer frente, como ya ha sucedido, a sanciones “millonarias”.

Bel prevé llevar a la próxima reunión del Consejo Sectorial de Medio Ambiente para su posterior paso por Comisión el texto renovado de las ordenanzas municipales, incluidas la de vertidos, para que pueda ser elevado al Pleno en la Sesión Ordinaria de diciembre.

La titular de Medio Ambiente ha lamentado las críticas que ha recibido por parte de la oposición criticando el “retraso” que acumula este proceso. “Hubiera sido más rápido hacerlo unilateralmente que consultando al resto de grupos, de los que cuales sólo uno ha hecho sugerencias, y quizá deberíamos haberlo hecho así porque igual nos critican por un proceder como por otro”, ha censurado la consejera.