El líder y portavoz de Caballas, Mohamed Alí, ha comparecido a los medios para explicar los cinco requisitos que plantea la coalición para dar su apoyo al plan del Gobierno central para hacer frente a la estrategia de bloqueo de Marruecos y que pasaría por un aplena integración en el acervo Schengen, esto es, en el territorio comunitario, incluida la Unión Aduanera. Una posibilidad que Caballas ve con buenos ojos, aunque aporta su visión on cinco propuestas que complementan la estrategia.

Caballas apoya la posibilidad de revisar la excepción al acervo Schengen que permitía los tetuaníes cruzar la frontera del Tarajal sin visado, pero con medias especialmente pensados para agilizar el tránsito de quienes cruzan la frontera por motivos laborales, familiares o para hacer turismo, pero todo ello compatibilizado siempre con dos aspectos que Caballas considera cruciales: un mar y mejor control de la frontera y el refuerzo de la seguridad, después de haber quedado evidenciada la debilidad de las fronteras terrestres, y, siempre bajo el marco de unas “nuevas y buenas relaciones de vecindad con Marruecos”. 

“Creo que aquí coincidimos todos, tenemos que trabajar de forma impetuosa para mejorar los mecanismos de control y seguridad de las fronteras, con un control riguroso y exhaustivo”, reclama Mohamed Alí, para quien todo ello debe estar siempre basado en la concordia y las buena srelacines con el papis vecino. Caballas, explica Mohamed Alí, comparte la esencia del lema del plan de Vivas, “Más España, Más Europa”. “Compartimos la expresión más España y más Europa, que sea la marca de identidad de ese nuevo modelo, pero creemos que, coincidiendo con la resolución del parlamento europeo, no es incompatible con unas nuevas y mejores relaciones de vecindad con Marruecos”.

Unas “nuevas y mejores” relaciones de vecindad que conllevarían, a imagen y semejanza de lo propuesto en Gibraltar, la creación de una zona de prosperidad compartida a ambos lados de la frontera. Una nueva relación basada en la cooperación y complementariedad “sin olvidar el primer eje, un control más riguroso, más profesional, que quede claro que son fronteras españolas europeas”. Caballas cree además que todo ello debe acometerse “sin tabúes” y garantizando el reconocimiento expreso “de forma institucional” de que Ceuta y Melilla son dos ciudades españolas y europeas. 

La coalición aplaude también la necesidad de un plante inversiones, pero exige que se centre en áreas en las que la ciudad orienta notables déficit como la educación, sanidad, vivienda, defensa, seguridad y políticas sociales. Todo ello siempre con un objetivo: dotar a la ciudad de un modelo económico sólido, estable y de futuro, capaz de crear empleo.

Estas son las cinco propuestas de Caballas detalladas de forma íntegra:

1.- Que por parte del Gobierno de la Nación se apruebe y ejecute, de manera inmediata, un Plan de Inversiones para Ceuta y Melilla que tenga por objeto tanto la mejora de infraestructuras y servicios, en particular en las áreas de Vivienda, Seguridad, Defensa, Justicia, Sanidad, Educación y Políticas Sociales-

2.- Implementación de un Plan Especial de Relanzamiento Económico, cuya finalidad sea la implantación de un modelo económico más sólido y estable, con mayor capacidad para crear riqueza y empleo.

3.- Que el Gobierno de la Nación inicie el procedimiento de revisión de todos los mecanismos políticos y administrativos que regulan el tránsito transfronterizo (incluyendo la vigente excepcionalidad contemplada en el Tratado de Schengen para los residentes de las provincias de Tetuan y Nador) con la finalidad de hacer compatibles un control exhaustivo y riguroso de quienes cruzan por nuestras fronteras, con mantener unas relaciones fluidas en el espacio transfronterizo que redunden en beneficio de todos los ciudadanos de ambos lados de la frontera.

4.- Que el Gobierno de la Nación realice las actuaciones diplomáticas que estime adecuadas para revertir la estrategia de Marruecos, iniciada en 2018, dirigida a desvincular económicamente a nuestras dos ciudades de su entorno. De modo que, partiendo del reconocimiento de la incuestionable soberanía española sobre Ceuta y Melilla, se establezca un marco de relaciones de buena vecindad con dicho país que tenga un doble objetivo: La creación de una zona de prosperidad económica compartida a ambos lados de la frontera, basada en la cooperación y la complementariedad; y   la agilidad en el tránsito transfronterizo de personas por razones familiares, laborales o de turismo.

5.- Que el Gobierno de la Nación inicie el procedimiento para la integración de Ceuta y Melilla en la Unión Aduanera común, siempre que, como condición previa y de manera consistente, quede garantizada la continuidad, tras la referida integración, de los incentivos que configuran el vigente Régimen Económico y Fiscal Especial de nuestras dos ciudades.