Para Caballas, la tasa especial sobre la ropa usada es más una multa que un impuesto, por ello ha presentado sus alegaciones a la aprobación de la Ordenanza Fiscal Reguladora de la Tasa por la prestación del Servicio de Racionalización, Ordenación, Control y Transporte continuado de determinadas Mercancías, y Gestión de ciertos plásticos.

Para Caballas, según explica en el texto de la alegación remitido al presidente de la Asamblea, Juan Vivas, “la acumulación de dos hechos imponibles absolutamente independientes, sin conexión alguna, desvirtúa el concepto de esta figura tributaria cuya finalidad es resarcir los costes de los servicios públicos afectados”. Y es que, en este caso, argumenta la coalición “la utilización de bolsas de plástico implica un coste que nada tiene que ver con el de la importación de prendas. Es por ello que consideramos que en todo caso, debería tratarse de ordenanzas diferenciadas”.

Además, añade la alegación, la tasa que pretende penalizar la importación de estas prendas “no se ajusta a la legalidad vigente en materia tributaria, tratándose más de una “multa” que de una tasa”. La determinación del hecho imponible es,a su juicio, “ absolutamente arbitrario y discriminatorio”; ya que “no se justifica con rigor por qué unas mercancías son susceptibles de ser gravadas y otras no”. Pero es que además, Caballas añade otro argumento: “los cálculos utilizados para la fijación de los tipos carecen de la solvencia técnica y del obligado rigor económico que exige la ley, por lo que devienen en nulos. “Es por todo ello que solicitamos que sean suprimido del texto de la ordenanza todo el articulado relativo a la Tasa por la prestación del Servicio de Racionalización, Ordenación, Control y Transporte continuado de determinadas Mercancías”.