Mohamed Alí, portavoz y único diputado de Caballas se quedó este miércoles más solo de lo que estaba en el salón de plenos. La coalición que lidera Alí emitió el único voto en contra, aunque confesó que "no con regocijo”.  Para Mohamed Ali el plan no cumple tres condiciones que considera impepinables pero que no se reflejan en el documento: “Consideramos fundamental que este documento se sostenga sobre tres consensos: social, institucional y un consenso con Melilla”.

Alí lamenta que el Gobierno no haya aceptado su propuesta de diseñar una red de protección social moderna y eficaz, ajustada a la realidad de la ciudad, como tampoco comparte que el documento no se haya consensuado con el Gobierno central, de quien dependen buena parte de las medidas. “Este programa depende del Gobierno de la Nación para lograr el cien por cien de su efectividad. Lo que propone siempre pasa por trasladar al marco de responsabilidad del Gobierno de España las medidas que se quieren adoptar en Ceuta, qué menos que consensuarlo con el Gobierno antes de  aprobarlo”.

Una falta de consenso que traslada también a Melilla, con la que no se ha contado para su redacción en temas que atañen a ambas ciudades autónomas y que en algunos aspectos, como los relacionados con la Unión Europea, disiente de Ceuta. “Tengo mi opinión personal, creo que es beneficioso para Ceuta, pero siendo discutible, sólo les digo una cosa a los señores de Vox: quitar Schengen es hacerle el juego a Marruecos, potenciar el aislamiento de nuestra ciudad, que no haya presencia de la UE en esa frontera. Marruecos se frotaría las manos. Pero es que, repito, si Melilla no está de acuerdo, cómo se va a platear ante la UE”.

Respecto al modelo de economía digital, con el juego online como eje, Ali cree que Ceuta se encamina a un “paraíso fiscal velado”- “A ver cuando eso se consagre qué van a pensar nuestros compatriotas que pagan entre tras cosas nuestro plus de presidencia”.

Por todo ello, resumía el portavoz de Caballas, “si no tenemos claro qué queremos hacer, cómo vamos aprobar un lance esta magnitud sin el respaldo del Gobierno de España, sin consenso con Melilla, ni consenso social en la propia Ciudad, me parece apresurado”.