El portavoz accidenta del Gobierno de Ceuta, Carlos Rontomé, ha lamentado este viernes la "falta de respuesta" del Ejecutivo de Pedro Sánchez a su oferta para sufragar los costes de la repatriación de todos los ciudadanos marroquíes que se quedaron atrapados en la ciudad tras el cierre de la frontera, el pasado 13 de marzo, y la "dejación de funciones" en la que a su juicio está incurriendo la Administración General del Estado al no hacerse cargo ni de ese colectivo ni de los inmigrantes que siguen llegando irregularmente y deben ser aislados por motivos sanitarios.

"La Ciduad se ofreció a repatriar a los marroquíes por vía marítima igual que han salido barcos desde Tánger hacia la península abonando todos los gastos necesarios, pero no hemos obtenido respuesta de la Secretaría de Estado", ha lamentado el consejero, que ha recordado que, mientras, es la Administración local la que "sin estructuras, recursos ni personal" no solo ha dado cobijo a aproximadamente un centenar de esas personas en una nave del Tarajal, sino que también atiende a los extranjeros que deben ser aislados por precaución frente a la COVID-19, de momento en un hostal y en breve en el antiguo Hospital de la Cruz Roja, que tendrá capacidad para unas 70 personas.

"La Ciudad se está haciendo cargo de la competencia de atención a los inmigrantes que llegan a la ciudad, cumpliendo la norma reforzada con un protocolo, pese a que hay espacios como el CETI que podrían ser utilizados, pero el Gobierno central prefiere que sea la Ciudad la que se haga cargo sin medios, con lo que opino que incurre en una dejación de funciones", ha criticado.

Rontomé ha explicado que en el antiguo Hospital del centro ya se han acometido las dotaciones "básicas" de duchas o calentadores necesarias para albergar personas a las que atendería la institución humanitaria. Entretanto ha referido que no ha habido "ninguna pega" con el cumplimiento del confinamiento que se impone a los indocumentados que se sospecha que pudieran haber contraído la enfermedad del coronavirus.

"En las pensiones están cumpliendo el aislamiento: firman un compromiso y hay un control por parte de la Consejería de Sanidad sobre su estancia y su evolución sanitaria, posible aparición de síntomas, etcétera", ha apuntado.