Tragsa hace todo de Ceuta. Lo mismo limpia que construye un polideportivo que hace proyectos que consolida taludes que combate el picudo rojo que renueva la Gran Vía. La navaja suiza del Gobierno de Vivas va a tener, durante los próximos ocho euros, una misión extra: proporcionar dos brigadas de jardineros de rección "inmediata" para atender los "desperfectos" que se vayan detectando "en las zonas de especial tránsito procedente de la actividad fronteriza".

Estas dos brigadas "desplazables" estarán formadas "por dos jardineros y dos ayudantes cada una" que costarán a las arcas municipales más de mil euros al día, concretamente 309.648 euros por ocho meses de trabajo, según establece el encargo rubricado por el consejero de Medio Ambiente.

La factura se pagará con cargo a la aplicación presupuestaria 'Mantenimiento entorno urbano afectado por el hecho fronterizo'.

Para Fernando Ramos, el hecho de que Ceuta sea "una ciudad fronteriza" donde "además del propio tránsito de personas y vehículos generados por una frontera habitual se produce de forma anual la Operación Paso del Estrecho (OPE)" da pie a "deterioros y menoscabos en las infraestructuras urbanas de servicios y ornamentales", así como "un incremento del ensuciamiento de las zonas afectadas".

Es por ello que quiere "reforzar algunos de los servicios prestados desde las distintas Consejerías", ya que los contingentes que integran los servicios municipales, los Planes de Empleo, Obimace, las Brigadas Verdes, etcétera, no parecen ser suficientes para garantizar el "mantenimiento de la jardinería de la ciudad".

Las brigadas de Tragsa trabajarán en "las barriadas cercanas a la frontera, más afectadas por los deterioros, así como por las vías principales de comunicación de la frontera con la zona portuaria, incluso puntos singulares de parada de ls vehículos en tránsito, fundamentalmente en el periodo de la OPE".