El Salón del Trono ha sido un año más el escenario del acto institucional del Día de la Constitución, que ha emir¡evado con los discursos del presidente de la Ciudad, Juan Vivas, y la delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, y ha acabado con la tradicional ofrenda de flores en el monumento ala Carta Magna en la plaza de la Constitución, deslucido por las obras de remodelación del Paseo de las Palmeras.

Un acto que ha estado marcado por el diálogo que resume el espía¡itrio de la Transición, que hizo posible la Constitución de 1978, la crisis de mayo y el vital apoyo del Estado, la pandemia y la convivencia, todos ellos ingredientes imprescindibles para la encrucijada que atraviesa Ceuta.

Pero si para algo sirven estos actos institucionales —al que solo ha faltado Vox— es para la formación de corrillo, apartes entre diputados de formaciones antagonistas e intercambio de opiniones. Algo que se ha podido ver en especial antes del inicio del acto institucional.