Tras casi tres años de retraso, el consejero de Fomento, Alberto Gaitán, ha situado este viernes "a principios de marzo" en su respuesta a una interpelación de Vox la fecha de finalización definitiva de la obra de Gran Vía, Plaza de África y Jáudenes en la que "no está previsto ningún proyecto modificado que suponga un incremento del gasto previsto en el encargo” al margen de “la puesta en valor de los restos del interior del edificio de los Trinitarios", que será licitada con un presupuesto estimado de 780.000 euros.
Carlos Verdejo ha lamentado la “espera eterna” que está sufriendo la ciudadanía con un proyecto en el que “todo apunta a improvisación” y Gaitán le ha explicado que “el número importante de positivos de la COVID-19 detectados en trabajadores durante el pasado mes de diciembre y enero obligaron a una ampliación del plazo de finalización que será tramitado por la empresa y revisado por los técnicos”.
Actualmente queda pendiente la finalización de dos entradas al aparcamiento subterráneo “que están prácticamente terminadas” y “la entrega de algunos detalles decorativos que en las próximas semanas ya se encontrarán instalados”. Según el consejero, en su ejecución no ha habido “ninguna improvisación”.
Gaitán ha precisado que la normativa vigente impide exigir responsabilidades o imponer penalizaciones a Tragsa por la demora acumulada en los trabajos, cuyo coste total se cifra en “7,8 millones de euros” a expensas de la liquidación definitiva.
La "transformación" del centro
El titular de Fomento ha aprovechado la interpelación para destacar que “el centro de la ciudad ha experimentado en los últimos años un proceso de transformación sustancial de los espacios públicos, mejorando la calidad y la accesibilidad de los mismos para convertirlo en un verdadero centro comercial y de ocio”.
“En la Plaza de África se ha conseguido la apertura de nuevas empresas gracias a la habilitación de espacios públicos para pasear y su integración en el núcleo de la avenida principal y en Jáudenes hay más espacio en las aceras y la actividad comercial y hostelera disfruta de una calle moderna con espacios abiertos que permiten el paseo y consumo de la población”, ha añadido.
En suma, para el Gobierno local la obra ha multiplicado el “atractivo turístico” de Ceuta para dar a los visitantes la oportunidad de “disfrutar de una forma sencilla, accesible, bonita y apetecible de nuevos elementos arquitectónicos, ornamentales y religiosos que potencian nuestra promoción en el exterior”.
