El Gobierno de la Ciudad por boca de su consejero de Medio Ambiente y Servicios Urbanos, Yamal Dris, anunció éste viernes que tiene intención de acometer en breve las obras prometidas en el Parque Urbano Juan Carlos I. Lo hizo en el Pleno en respuesta a una interpelación del líder socialista, Juan Gutiérrez.

Gutiérrez llegó a blandir durante su intervención una reproducción del cartel que lucía hasta hace bien poco en la Marina en lo alto de las rampas que unen la calle con la parte de abajo y dan acceso a las pistas deportivas. El cartel se fue corriendo, como el payaso malo del anuncio de detergentes o como el propio proyecto que anunciaba, con el paso del tiempo. Y es que el Ejecutivo prometió esas obras, también entonces para ya mismo en agosto de 2019.

Y lo que sucedió es que las instalaciones han seguido deteriorándose y hoy ofrecen pistas con grietas de 10 centímetros en las que parece un milagro que nadie que las use para practicar deporte acabe en el hospital, canastas con aros y tableros doblados que nadie se plantea reponer, porterías con postes resquebrajados, sin redes que amortigüen la pelota si hay gol, focos mal ubicados que no dan luz cuando cae la noche porque sus haces los tapan los árboles y un largo etcétera de detalles que indican abandono y que aún así siguen siendo ampliamente usadas.

“Se están quedando obsoletas y precisan renovación y sustitución”, afirmó Gutiérrez. Se quedó corto. “En otras ciudades focalizan gran parte de sus recursos en la implantación de infraestructuras deportivas para que se abran para los ciudadanos y ciudadanas. Aquí eso no se ve. ¿Qué ha ocurrido con el proyecto de remodelación?¿Por qué no se han empezado los trabajos previstos para 2019? ¿A parte del cartel propagandístico se ha hecho algo? ¿Está en fase de licitación o estudio?”, preguntó Gutiérrez.

Le contestó Dris. Sí, estaba previsto, y lo que pasó fue, según Dris, la pandemia. Que ha paralizado gran parte de los proyectos en todas las administraciones. Sostuvo. Y recordó que el proyecto contaba con una financiación de 1,7 millones de euros. Preveía techar las pistas de pádel y renovar completamente el resto, instalando vallas para que quienes usen los campos de fútbol sala no se pasen media pachanga yendo a recoger la pelota al helipuerto. Y también una instalación de calistenia. Y tantas cosas que se mantienen con la intención de acometer en breve.”Es verdad que se ha tardado”, aseguró Dris. Se sigue tardando en realidad. “Pero no ha sido porque no hayamos querido sino que hemos estado un año casi en blanco porque no se ha podido realizar ninguna contratación. Hay algunos contratos ya adjudicados y se está a expensas de poder empezar para poder realizar todas estas obras”, siguió el consejero.

Dris no especificó en ningún momento qué obras están ya adjudicadas, que parte de la remodelación de las pistas deportivas se va a acometer en breve ni cuándo. Es decir, a efectos prácticos volvió a prometer lo mismo que en agosto de 2019. 

Y obvió que durante la pandemia, desde marzo de 2020, el Ejecutivo sí que acometió obras, e incluso las culminó o las adelantó de forma notable.

“Estamos en 2022 y no han hecho absolutamente nada, ni creo que lo hagan. Se esfumó en el aire. Otro megaproyecto más que se esfumó en el aire. Deberían abrir la mente y saber que Ceuta necesita cambios acelerados. Los ceutíes así lo piden y Ceuta lo necesita. Pónganse a trabajar y déjense de tantas vallas publicitarias”, le espetó Gutiérrez.

“Las pisas se van a cambiar y si Dios quiere la foto la verá usted así. Dice pónganse a trabajar, ustedes son los únicos que saben cómo se hacen las cosas y se trabaja. Usted sabe que los tiempos y los trabajos, luego surgen problemas, surgen miles de cosas que hacen que no se pueda llegar como uno quiere. Usted cree que yo no quiero que hagamos el parque. Ojalá estuviera para mañana”, cerró la interpelación Dris.

Para mañana sólo podría estar si Dios verdaderamente quisiera.