La aduana comercial también es un misterio para el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Ceuta. El Ejecutivo de Vivas sabe tanto como el resto de ceutíes o al menos eso ha asegurado, pese a que ha reconocido que está en permanente contacto con el Ministerio de Exteriores.  Lo único que sabe el Gobierno local es que será “en los próximos das”. “Estamos esperando lo que nos indiquen al respecto”.

El Gobierno, además, da por hecho que la presencia de delegaciones Ceuta y Melilla en la Reunión de Alto Nivel (RAN) entre España y Marruecos prevista para el próximo 1 de febrero en Rabat, es poco menos que inviable. Eso sí, los intereses de las ciudades autónomas estarán suficientemente representados por el Estado, que es quien tienen la responsabilidad en materia de política exterior, ha argumentado el portavoz del Ejecutivo, Alberto Gaitán. “Sea del color que sea, siempre vamos a estar a disposición del Gobierno de la Nación”. Pero, tratándose de Marruecos y Ceuta y Melilla, esa posibilidad es solo política ficción, ha deslizado entre líneas: “Si esa hipótesis fuese una realidad hablaríamos, pero es que no está sobre la mesa”.

"En las relaciones internacionales y más a esos niveles nunca hay presencia de comunidades autónomas”, ha tratado de escabullirse el portavoz del Ejecutivo, Alberto Gaitán, pese a que, como ha recordado Ceuta Ya, en anteriores citas de este calado han estado presentes comunidades autónomas como Andalucía o Canarias cuando se abordaban cuestiones que las implican directamente, como es el caso de la inmigración. “No es habitual”, se ha defendido Gaitán cuando se le ha puntualizado.

Y del futuro de la aduana comercial o del futuro de la gestión de la frontera, poco o nada más sabe el Gobierno. “Decir lo que siempre reiteramos y que el presidente ha tenido oportunidad de comentar en diferentes ocasiones, que es la normalización de la frontera del Tarajal. Creemos importante y necesaria la exigencia del visado para poder entrar en España y el establecimiento de la aduana comercial”, ha recordado Gaitán.

El portavoz ha vuelto a insistir en los efectos “positivos” que hasta ahora ha tenido la suspensión del acervo Schengen en el Tarajal con la  exigencia de visado: “La Ciudad ha cambiado mucho desde el caos que había anteriormente al cierre de la frontera, en todos los ámbitos, en el sanitario, en el ámbito de la educación, en los menores no acompañados, en la situación del Puerto, en la caída de la economía irregular, en los accesos por la N-352 . Y sobre la aduana comercial, el Gobierno tiene tan solo una apreciación: “La importancia de que se establezca una regulación de la aduana comercial, porque es importante en todos los aspectos que sea ordenada y esto favorecerá al turismo”.

Cuestiones sobre las que, a falta de una semana para la RAN no se sabe nada aún, especialmente en el caso de la regulación de la aduana comercial. El Gobierno, de momento, dice estar tranquilo. Le basta con saber que va a abrir de forma inminente. “Vamos esperar a ver en qué momento se anuncia la apertura. Estamos evidentemente en contacto con la Administración General del Estado. Se nos ha dicho que será en los próximos días y estamos esperando la confirmación. Todavía no la tenemos”.

Más allá del regreso de las importaciones de pescado, poco más se sabe también de las mercancías que estarán permitidas o las cantidades que se podrán exportar o importar. Tampoco nada sabe el Gobierno,  a la espera de novedades. “Estamos esperando lo que nos indiquen al respecto”.