"No hay retraso en las obras", incluso podrían "acabar antes de lo previsto" y no habrá problemas para la Cuna de la Legión. El estado actual del parque de Santa Catalina -lleno de zanjas y vallas- inmerso en una aparatosa obra de mejora encargada a dedo a Tragsa, no preocupa al portavoz de gobierno Alejandro Ramírez, que en ningún caso ve peligrar el recorrido de la multitudinaria carrera legionaria. Así lo afirmo a preguntas de los periodistas tras el Consejo de Gobierno de este martes.

Cabe tener en cuenta que los trabajos fueron anunciados tras una de las reuniones semanales de consejeros, en julio de 2022. No fue necesaria una licitación que entorpeciera la tramitación, pues se encargó a la sociedad pública anteriormente citada y, sin embargo, las obras no comenzaron hasta agosto de 2023.

Teniendo en cuenta ese lapso de tiempo, lo que son los trabajos propiamente dichos, "no van con retraso", según Ramírez, sino al contrario: "La idea era que acabaran en diciembre e incluso podría ser antes, en noviembre o octubre, según nos transmiten".

El portavoz hizo un recorrido por el desarrollo del proceso de mejora del parque durante los últimos meses, indicando que "a final de la pasada legislatura se firmó el encargo", sustentando "una obra importante" de la que ya se han ejecutado 500.000 euros -el presupuesto alcanza los cuatro millones- que va a entrar "en su segunda fase". La más compleja, que supondrá llevar al lugar tierra y vegetación.

Por descontado, la actuación no estará finalizada coincidiendo con el desarrollo de la Cuna de la Legión, prueba deportiva cuyo recorrido incluye esa zona y que está prevista para el dos de marzo. En este sentido, Ramírez garantizó que "los servicios ya están coordinados para que en la primera semana" de ese mes "los caminos de tierra por los que pasa ya estén balizados y acondicionados".