Vencido el último plazo dado para su conclusión, el caso de la obra de la Estación de Ferrocarril, diez años después, no tiene explicación. Si la tiene, el Gobierno de Vivas, concretamente su consejero de Fomento, Néstor García, no la sabe o quiere darla. Este viernes, durante su comparecencia como portavoz accidental del Ejecutivo, ha recurrido a un cúmulo de vaguedades para salir del paso.

Muy político, primero ha afeado a Caballas que, por sus críticas a la gestión del tema, parece que "no quiere que termine el proyecto y se alegraría de que fuese imposible completarlo". García ha dado por seguro que no tendrán esa satisfacción los localistas, aunque no sabe cuándo podrá darles con su inauguración en las narices: "Se terminará en el mínimo tiempo necesario para cumplimentar la obra", se ha escurrido al ser preguntado por plazos concretos.

En el transcurso de sus explicaciones ha dado por normal el enésimo incumplimiento de los tiempos de ejcución estipulados, algo que incluso ha llegado a decir que pasa con "todos" o casi todos los proyectos.

Interpelado por las razones de la última demora ha reconocido que existen turbulencias "de índole técnico y económico, en ningún caso políticas". Se le han preguntado cuáles pero tampoco ha sido muy preciso. En relación con las primeras, que el hangar exterior "hay que hacerlo fuera de Ceuta y se traerá como un conjunto" y que los directores de la obra, José González y María José Aranguren, del "prestigioso" despacho 'Aranguren & Gallegos' quieren dejar el proyecto, por el que en enero pidieron más dinero para retomarlo.

¿Por qué? Tampoco lo sabe. Se han entablado "conversaciones" sobre una posible ruptura por las buenas o por las malas. García ha especulado con que quizá les va tan bien que ya no están interesados en la Estación de Ferrocarril. Si se cosuma el divorcio el consejero quiere que Javier Arnáiz, arquitecto municipal, tome las riendas.

En materia económica no ha sido más concreto. Ha asegurado que Dragados "emite" certificaciones, lo que a su juicio prueba que la obra avanza, y ha explicado que luego esas facturas deben tener luz verde de Intervención. Preguntado por qué no se la da ha negado que suceda tal cosa.

El titular de Fomento ha dejado claro, eso sí, que el Gobierno "entiende" el malestar de los vecinos por el devenir de un proyecto que empezó hace ya casi diez años y ha mostrado el "pesar" del Ejecutivo por los contratiempos surgidos, que podrían agravarse si el Ministerio termina reclamando su aportación inicial con cargo al 1% Cultural.

Como tantos otros temas de Emvicesa en la época gestionada por Francisco Márquez y Antonio López, en los Juzgado se han abierto también diligencias en relación con este proyecto y el ex gerente de la sociedad, ahora encarcelado, fue en su momento citado a declarar como testigo.