Juan Gutiérrez, el ugetista ceutí señalado por 'Irispress' como protagonista de una presunta trama de afiliación "masiva" en el PSOE de Ceuta supuestamente en beneficio de Pedro Sánchez hasta "a cambio de puestos de trabajo", ha roto este martes su silencio. "Todo el trabajo que hago por mi partido no es con ánimo de lucrarme porque no me hace falta y si fuesen socialistas de corazón", ha dicho de quienes le han criticado, "se alegrarían porque en menos de un año el censo haya aumentado en más de 100 afiliados que pagan rigurosamente sus cuotas".

"¿Dónde está el problema, señora Sandra López?", ha interpelado a la líder del grupo de apoyo local a Susana Díaz, a quien ha acusado de "malmeter y dividir el partido" en vez de "dar clases".

Gutiérrez percibe "mucho miedo" en el ambiente socialista ceutí "por la ambición de un sillón". Ello ha llevado, a su juicio, a lanzar "acusaciones muy graves sobre mí que me llevarán a tomar acciones legales sobre quienes lo han hecho".

"El socialismo se lleva en el corazón y todo esto que están haciendo sobre mi persona me hace mas fuerte y me da más ganas de seguir haciendo grande mi partido: no me van a amedrentar ni a intimidar porque soy una persona muy bregada en el sindicalismo y toda esta pataleta de niño chico me da risa", ha recapitulado.

El sindicalista cree que López y compañía "ven que van a tener el Congreso Regional perdido y ahí es donde está el miedo, en que el gallinero en que se había convertido Daoiz va a desaparecer: las primarias nacionales les importan poco, piensan en términos locales y si quieren guerra la van a tener, sacaré mi artillería y les haré frente porque se han pasado mucho", ha advertido.

Según Gutiérrez, "todas" las afiliaciones realizadas han sido "legales" y Ferraz "les ha dado el visto bueno". "Quienes se han afiliado gracias a mi campaña lo han hecho por voluntad propia y siguiendo lo que me ha movido, unos ideales que pasan porque Sánchedz vuelva a ser secretario general igual que ellos se han movido para que lo sea Díaz".

"Si yo he mandado un mensaje de voz", ha terminado sobre el texto reproducido por 'Irispress', "no veo nada malo cuando ellos han llamado uno por uno a cada militante preguntándoles dónde viven para ir hasta allí y obtener su firma y aval". "Tengo testigos de que también han llamado a militantes para preguntar por qué están afiliados, algo que sí es vergonzoso", ha concluido.