SEMINARIO WEB

'Ibn Jaldun' reflexiona sobre la trascendencia del rango autónomico de Ceuta tras el desafío marroquí

'Ibn Jaldun' reflexiona sobre la trascendencia del rango autónomico de Ceuta tras el desafío marroquí
foro ibn jaldun
Mustafa, moderador, con Hernández y Aróstegui, los dos intervinientes en el seminario web.
El Foro reúne a Adolfo Hernández, 'padre' del Estatuto de 1995, y a Aróstegui, histórico defensor de la necesidad de que la ciudad se convierta en Comunidad Autónoma, en un debate sobre la importancia real de lograrlo. Para el primero es limitada y los responsables de la administración local han desaprovechado las capacidades a su alcance. El segundo considera que "ser iguales" al resto de España es clave en términos internos y externos.

El Foro Ibn Jaldun, un nuevo espacio de “pensamiento crítico” plural en la ciudad, ha contrapuesto este jueves en un seminario web las visiones que sobre la autonomía de Ceuta tienen Adolfo Hernández, ‘padre’ del Estatuto de 1995, y Juan Luis Aróstegui, acérrimo defensor de la conveniencia y necesidad de que la ciudad se convierta en Comunidad Autónoma. “El poder debe ser para algo, no para plantar cara al país vecino”, ha dicho el primero. “Marruecos se hace fuerte en nuestra precariedad y Ceuta, en la igualdad con el resto de los españoles”, ha advertido el segundo.

Hernández ha opinado que lo verdaderamente trascendente es decidir qué poder autonómico tiene Ceuta, cuál necesita para desarrollarse adecuadamente y cómo puede, en su caso, obtenerlo. En su exposición se ha remontado hasta los meses de elaboración de la Constitución, en la que considera que quedó plenamente colmada la aspiración de que la Carta Magna recogiese la españolidad de las ciudades autónomas en régimen de igualdad con cualquier otro territorio del país.

También ha repasado durante el debate, moderado por Mohamed Mustafa, las singularidades que para el acceso a la condición de Comunidad Autónoma se establecieron para darles viabilidad cuando, por ejemplo, lo reclamase una sola provincia. “El poder municipal es imprescindible y las CCAA se asignaron competencias que procedían del Estado sin entrar en el ámbito local y que no son de cumplimiento obligatorio”, ha advertido.

“El Estatuto de Ceuta es materialmente igual que el de las Comunidades y sólo hay 19, ya lo quisieran otras grandes ciudades, por lo que la descalificación de que esto es un ente local…”, ha advertido el doctor en Ciencias Políticas, “aunque no tengamos competencia legislativa y no incluyésemos la garantía constitucional de la Ciudad”.

Para Aróstegui, sin embargo, el Estatuto fue el fruto de la negativa del Gobierno de Felipe González a dar pasos con Ceuta y Melilla más allá de lo que pudiese aceptar Marruecos sin conflictos mayores y la Constitución, “una claudicación en toda regla que a lo mejor se hizo todo lo bien que se pudo, pero no bien”.

adolfo hernández

“A Madrid no podemos llegar a pedir ser Comunidad Autónoma frente al rey del país vecino: hay que ser serios y argumentar por qué los ceutíes estamos discriminados, algo que estaría justificado fundamentalmente en que las materias cercanas deben tratarse en instituciones próximas, con transparencia, y eso no se cumple con lo que gestiona la Delegación”, ha criticado.

Desde su punto de vista es demasiado “atípico” que materias como la Educación se gestionen en realidad desde Madrid, a una distancia que se revela insondable ante la incapacidad de un gabinete tras otro para dar cierto margen de maniobra a la Dirección Provincial hasta el límite de la parálisis. Lo mismo con el Urbanismo y la ausencia de Ley del Suelo. “Tenemos competencias exclusivas en energía y podríamos tener absoluta eficacia con renovables”, ha puesto otro ejemplo.

Aróstegui también ha hecho historia. “Fraga, padrino de Aznar, padrino de Casado, dejó por escrito en los años setenta que Ceuta y Melilla estaban en el mercado: salimos a la calle y nos molieron a palos, la derecha que siempre ha acusado a la izquierda de entreguista”, ha puesto el sindicalista los puntos sobre las íes. “La españolidad de Ceuta está cuestionada siempre por españoles ideológicamente transversales

“No se trata de si Marruecos lleva o no razón, sino de si es capaz de concitar los apoyos suficientes para condicionar la naturaleza de nuestra entidad institucional, que en Derecho Internacional es la clave para empezar a estudiar las razones de una diferencia y si se liga a una colonia”, ha alertado el exdiputado autonómico.

Para Aróstegui la política del Gobierno central siempre ha sido aceptar lo que se pueda con Ceuta y Melilla sin indignar de más a Rabat “y así sucedió también en mayo”. Ahora, sin embargo, a su juicio es una oportunidad trasladar al ámbito europeo lo sucedido con el anexionismo del país vecino incardinado. “Marruecos se hace fuerte en nuestra precariedad y Ceuta, en la igualdad con el resto de los españoles”, ha advertido.

aróstegui

“Estamos hablando de instituciones que son como máquinas que pueden ayudar a la ciudadanía, pero necesitan maquinistas y de su calidad depende que se lleve bien o no”, ha dejado entrever Hernández que los capitanes de la nave local no han dado la talla hasta ahora. Además, ha tildado de “populistas” los argumentos de su interlocutor, que no obstante ha coincidido con el socialista en que el Estatuto sólo es “un instrumento”. “Como con una guitarra, tenerlo no garantiza dar un buen concierto, pero sin ella no es posible”, ha resumido.

Desde el punto de vista de Hernández “la Ciudad puede desarrollar leyes de forma amplia, con la más amplia capacidad normativa que se puede”, pero el problema es que no se han hecho Reglamentos o, si acaso, con cuentagotas. Cuando Aróstegui le ha preguntado “por qué en Asturias o La Rioja” se pueden alcanzar objetivos de una forma más simple, el también profesor universitario ha apuntado que esas regiones uniprovinciales fueron “más listas”.

“En Ceuta hubo una frustración evidente con el Estatuto porque no hubo forma de consensuarlo con los partidos localistas, fue un diálogo imposible, y el hartazgo de las Cortes Generales llevó a hacerlo unilatelarmente”, ha recordado Hernández, que ha reprochado a Aróstegui haber quedado anclado en tesis “conspiranoicas”.

El exsecretario general de CCOO ha rebatido que “si pasaron doce años entre el último Estatuto aprobado y el de Ceuta fue porque el Gobierno no quería que Ceuta tuviese autonomía”, pero ha coincidido “absolutamente” con el otro interviniente en que, sin renunciar a “reivindicar la Transitoria Quinta para ser Comunidad Autónoma”, en la Ciudad “nuestro Estatuto sólo se ha aprovechado para nombrar 19 directores generales, tener 70 asesores…”. “Imagínate lo que hubiera sido Comunidad”, ha advertido el socialista.

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