¿Cómo se traduce eliminar la excepción al acervo Schengen, formar parte de la Unión Aduanera o ser catalogada como región ultraperiférica? ¿Qué beneficios conlleva y qué inconvenientes? ¿Es realmente necesario para unas ciudades que han transitado todo su periodo de democracia, y el previo, con estas singularidades? El Gobierno de la Ciudad, con su presidente a la cabeza tiene claro que sí. Lo ha repetido en Bruselas a lo largo de toda la jornada de este miércoles. Quiere una frontera “normalizada”, dotada de la infraestructura necesaria acorde a su naturaleza como frontera exterior de la UE, así como la implantación de la aduana comercial.

Sin embargo, el presidente Vivas, al igual que algunos de los asistentes a la presentación del informe ‘+ España, + Europa’- encargado por el eurodiputado Jordi Cañas, maestro de ceremonias del evento, a la consultora ‘Ernst&Young’- ha mostrado ciertas dudas o reticencias a alguno de los aspectos recogidos en el documento. En el caso del titular de la Administración local ceutí ha agradecido “sobremanera” algunas de las aclaraciones vertidas por los técnicos de la citada consultora. En su caso, la referida a la adhesión a la Unión Aduanera y si ello podría afectar al actual Régimen Económico y Fiscal. “Existen más ventajas que inconvenientes”, ha destacado el técnico de la consultora, Alberto García. “Hay que ser conscientes que no implica la pérdida de las bonificaciones fiscales en materia de imposición directa, ni de ser parte del territorio IVA, aunque se tenga que hacer alguna adaptación del IPSI”. También ha destacado que la supresión de territorio franco que conllevaría la adhesión, no impediría el establecimiento de zonas francas o económicas especiales, como las tienen Canarias, territorios de Polonia o Italia. ¿En Ceuta qué ubicaciones podrían ser calificadas como tales? El puerto, por ejemplo.

No solo para el presidente Vivas ha sido motivo de preocupación la Unión Aduanera. Algunos presentes también han mostrado recelo que su impacto en aspectos como el IPSI condujese a cambios sustanciales en procedimientos administrativos, o generase una carga fiscal para la ciudad. “No exportamos, sino importamos”, han destacado entre el público, a quienes los expertos les han tranquilizado, restándole importancia. “No tendría que suponer una mayor carga fiscal. Es cierto que a las ciudades autónomas les preocupa esa Unión Aduanera, que requiere de unos requisitos más formales, pero es tan sencillo como fomentar algo que ya existe en Canarias, como es la ventanilla única aduanera con los puertos de la península”.

Como una metralleta transformada en batería de dudas y preguntas ha disparado la consejera melillense de Economía y Hacienda, Dunia Almansouri. Para quien eliminar la excepción Schengen no afectaría directamente a los residentes en las ciudades autónomas, “porque salimos y entramos sin problema”. Sin embargo, existe un matiz, como ha destacado García, “los movimientos en Ceuta y Melilla con el resto del territorio nacional no son los mismos que entre dos provincias españolas. Eso de verificar la identidad del ciudadano desaparecería”.

También le preocupaba a Almansouri los intercambios comerciales con Marruecos en el supuesto de integrarse en la Unión Aduanera. “Conseguiríamos beneficios con el resto de Europa, pero qué ocurriría con los que nos interesa, como lo son con nuestro vecino”. Para los técnicos de ‘Ernest&Young’ no es tan complejo, ni conlleva renunciar a esos intercambios con Marruecos, ni si quiera que se compliquen. “El comercio con el reino alauita requeriría de unas aduanas comerciales en las que se aplicaría la misma normativa que existe si exportas e importas de Almería a Marruecos. Y en el caso de las pequeñas importaciones no estarían sujetas al IPSI de importación. Lo que se plantea con el informe es que se establezcan las mismas condiciones que prevalecen tanto en el resto de España, como en Europa”.

Son algunas de las dudas que ha generado y generará un informe cuyo propósito es el de reflexionar sobre la europeidad que ya existe en las ciudades, pero que hasta ahora no ha generado un debate suficiente en las instituciones de la Unión, ha destacado Cañas. “Intenta impulsar un foro que busque el consenso a la hora de determinar qué quieren Ceuta y Melilla sobre su futuro”, ha dicho el eurodiputado de Ciudadanos, que ha dejado las llaves para abrir esa etapa de cambios en las casas de las ciudades autónomas. “Lo importante ahora es comenzar. Y eso es decisión vuestra. Este informe va a estar vivo y, una vez que echemos a andar, incorporará todos los aspectos que sirvan para enriquecerlo y a darle continuidad”.