Según adelantaba este domingo el diario ABC, el Ministerio del Interior baraja rediseñar el perímetro fronterizo en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla ante la evidencia de que ha sido superado por la presión migratoria y que no tiene ya “ningún efecto disuasorio”. Las oenegés, en cambio, no creen que sea una solución apuestan por permitir a los subsaharianos solicitar asilo en Ceuta.

El rediseño y refuerzo de la frontera del tarajal que se plantea Interior,, advierten al diario de Vocento fuentes del Ministerio, "no será rápido de desarrollar ni fácil ni barato”. El nuevo sistema, explican estas mismas fuentes del departamento que dirige Juan Ignacio Zoido, aportará “más información” de lo que ocurre al otro lado para “no depender tanto de Marruecos”, así como un refuerzo de los medios físicos de contención con el alargamiento de los espigones de Benzú y Tarajal, ya anunciados.

Medidas que no comparten las organizaciones no gubernamentales, como ña Asociación Pro Derechos Humanos (APDH), la Federación SOS Racismo y Prodein que no creen necesario este refuerzo y apuestan que, al igual que los sirios, los subsaharianos tengan derecho a solicitar asilo.

"Si con los subsaharianos pasara igual que con los sirios no habría problema pero no tienen el derecho a pedir asilo, están vetados en la frontera", ha señalado a Europa Press el presidente de Prodein en Melilla, José Palazón, recordando que los refugiados sirios han dejado de ser un problema cuando se ha regulado su derecho a solicitar asilo. "La gente no viene a divertirse, está escapando de la muerte y no tienen más remedio que saltar la valla porque no tienen otra forma de entrar. No hay que tomar medidas policiales extraordinarias como si fuera una agresión", defienden desde Prodein En la misma línea, el portavoz Estatal de SOS Racismo, Mikel Mazkiarán, ha subrayado que el reforzamiento de la valla de Ceuta "en ningún caso" va a solucionar el problema de fondo, que, en su opinión, es la "desigualdad entre países" y una política migratoria "centrada exclusivamente en el control de la entrada".

El portavoz de APDH Carlos Arce, ha asegurado en declaraciones a Europa Press que la "única realidad" que hay es que estas personas la "única" manera que tienen de llegar a Europa es entrando por estas vallas. "Es un poco cínico que se muestre a estas personas como una invasión virulenta cuando en realidad es lo contrario", ha criticado, destacando que la vía de entrada irregular en Ceuta y Melilla es "absolutamente marginal" porque el número de subsaharianos en España "representan una minoría".