Tras muchos meses en silencio, Izquierda Unida y PDSC reaparecen en un comunicado conjunto para clamar contra el proyecto de reforma de la Gran Vía y reclamar el cumplimiento del plan de legalización de las viviendas del Príncipe Alfonso aprobado en 2006.
En el comunicado, firmado por el coordinador de IU, Mohamed Musa y el presidente del PDSC, Tarek Mizzian, denuncian las “política de desigualdad en nuestras barriadas, favoreciendo al centro de la ciudad y pisoteando a la periferia como es costumbre del Partido Popular” con “inyección de lluvia de millones de euros” en proyectos como el de la reforma de la Gran Vía, presupuestado por el Gobierno en 7,8 millones de euros, mientras “en la periferia la mayoría de las barriadas sufren grandes carencias estructurales y equipamientos básicos , como pueden ser acerado público ,red de saneamiento, alumbrado público ,zonas verdes o zonas de juego como parques infantiles para que los más pequeños tengan a bien su desarrollo y bienestar personal”.
"Papeles para todos"
PDSC e IU desgranaban las barriadas que sufren estas carencias, todas en el Cintrón que rodea al centro : Arcos Quebrados, Cabrerizas Altas y Bajas, Cortijo Moreno, Fuente Terrones, Almadraba, Los Rosales… Y no se olvidan del Príncipe recordando que en 2006 el PP secundó la propuesta de legalización de las viviendas irregulares de Príncipe Alfonso –“papeles para todos”, reclaman- y casi en 2018, “nada o poco se sabe de dicho plan urbanístico fomentando las desigualdades entre unos ceutíes y otros entre centro y periferia”.
Ambos partidos exigen al Gobierno un plan de barriadas urgente “de la periferia de aquellas barriadas más necesitadas para resolver las grandes carencias en infraestructuras y equipamientos básicos para el desarrollo y bienestar de estos ciudadanos a los cuales su ejecutivo discrimina y califica de ciudadanos de segunda en detrimento de favorecer a colectivos y zonas del centro de su condición y afines”.