Márquez reconoce por fin que ha falseado el montante real de la deuda total asumida por la Ciudad


Márquez reconoce por fin que ha falseado el montante real de la deuda total asumida por la Ciudad

- Después de negarlo varias veces y de encubrir el incremento de la deuda bancaria en la inversión en el campus y el 'Plan Aparca', el consejero reconoce que los 50 millones del 'método alemán' no están computados por el Ministerio

- Los compromisos de pago pendientes de la Administración local con las entidades crediticias, las constructoras y otros proveedores se acercan, oficialmente, a los 300 millones de euros

- El consejero asegura que "la situación está bajo control" pese a que augura problemas con los ingresos previstos por la venta del 'Plan Aparca', terrenos y concesiones varias

Después de negarlo rotundamente, aún a costa de contradecir la versión del Ministerio de Economía, hasta en tres ocasiones, el consejero de Hacienda, Francisco Märquez, ha reconocido este viernes en rueda de prensa que no, que no decía la verdad cuando durante los dos últimos años ha afirmado que la deuda con los bancos de la Administración local crecía a coste de ejecutar inversiones con las del campus universitario o la primera fase del 'Plan Aparca'.

Tal y como alertó Caballas hace un mes, no es cierto. Los 200 millones de euros en los que el Estado cifró en junio la deuda con los bancos de la Ciudad Autónoma a fecha 31 de diciembre no recogen todos los compromisos de pago contraídos por el Gobierno de Vivas para el futuro. Ni mucho menos. Como mínimo hay que añadirle los casi 50 millones financiados por el 'método alemán', que se empezarán a pagar este año, y los cerca de 30 que se adeudan a los pequeños, medianos y grandes proveedores por facturas sin saldar de este ejercicio (algo más de 23 millones) y de los anteriores.

Tampoco es verdad, como el también diputado nacional dijo en primavera a los periodistas, que de años anteriores no se arrastraba ninguna deuda pendiente. Son, en el mejor de los casos, seis millones de euros, aunque Márquez ha dicho que "a ningún contable le llama la atención" que una institución como la Ciudad farde de superávit año tras año mientras deja facturas sin pagar porque "tienen consignación presupuestaria, y en el caso de las que no la tienen se la vamos a buscar".

A pesar de todo, Márquez ha seguido presumiendo este viernes, justo después de celebrar la convocatoria extraordinaria de la Comisión Especial de Cuentas que exigió la oposición para saber "la situación real, detallada y actualizada de las cuentas públicas" de practicar la "transparencia absoluta".

"Hemos apreciado en Caballas y el PSOE predisposición a colaborar, que es lo que necesita la institución, y les hemos asegurado que mantendremos cuantas reuniones sean necesarias y que tendrán información por adelantado sobre el proyecto de Presupuestos para 2012", ha resumido Márquez el contenido de la cita, que según ha dicho ha transcurrido por buenos cauces.

"La situación está bajo control, en una situación relativa y excepcionalmente positiva si tenemos en cuenta el contexto económico actual, lo que nos permite garantizar el sostenimiento de las cuentas hasta finales de año porque la recaudación se está ajustando a lo previsto", ha presentado la mejor cara de la moneda el consejero.

La peor, la que parece que más le preocupa, son las "desviaciones" que se aventuran en el Presupuesto elaborado por las dificultades más que notorias que se está encontrando el Ejecutivo para hacer caja por los métodos extraordinarios que había proyectado desprendiéndose de distintos activos (los garajes del 'Plan Aparca' y distintos terrenos y concesiones administrativas).

"Hemos cumplido con trabajadores, bancos y tributos"

"Hasta ahora hemos cumplido nuestras obligaciones en todo momento con los sueldos de los trabajadores, con los bancos, con los tributos y con la Seguridad Social, algo que seguiremos haciendo, así como, hasta el límite de nuestras posibilidades, con los proveedores", ha detallado Márquez, quien ha justificado los retrasos que acumulan muchos proveedores en que previendo que la compensación del IPSI se cobraría en otoño y no en mayo, como ha sucedido, se decidió demorar "pagos no esenciales".

Las elecciones de mayo tampoco ayudaron a mantener un ritmo más ágil de abonos, por lo que Márquez ha afirmado que la Ciudad está ahora "recuperando la normalidad" en sus desembolsos. "Sabemos que debemos corregir nuestros mecanismos de pago para ser más ágiles y eficaces en la tramitación de los compromisos desde que entran en la Administración hasta que llegan a Hacienda", ha argumentado, "y a ello nos vamos a aplicar".

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