El porteo peatonal de mercancías por la frontera del Tarajal, suspendido el pasado 9 de octubre indefinidamente, que se iba a retomar el lunes pasado, tampoco se restablecerá el próximo. Según ha informado la Delegación del Gobierno este sábado, el país vecino ha comunicado que las "obras" que está realizando en su lado del paso "no estarán concluidas" para principios de semana.

"Cuando estén terminados se reiniciará la actividad", se ha limitado a apuntar la institución de la Plaza de los Reyes.

El Reino alauita está ejecutando trabajos de "cableado" de su parte de la frontera y el acondicionamiento de zonas del tránsito de porteadores, pero no existe certeza de si finiquitará esas tareas durante la próxima semana.

A ojos de CCOO, todas estas idas y venidas no son más que una especie de parodia: "Las irregulares y ya prologadas restricciones impuestas por Marruecos y España al tránsito de mercancías y personas por el paso fronterizo del Tarajal" no están ligadas a "decisiones circunstanciales, improvisadas, temporales o inducidas por cuestiones técnicas", sino el fruto de una estrategia "irreversible" que solo se dosifica "para evitar la reacción tumultuosa de los colectivos afectados, especialmente en Marruecos".

La paralización del tránsito peatonal de porteadores se justificó “con el fin de garantizar la seguridad en todos los circuitos del porteo” y como "una medida para evitar los riesgos que provoca la acumulación de miles de personas a ambos lados de la frontera”.

“Se va a tratar de reorientar y canalizar de manera más ordenada el tránsito de los porteadores [mujeres los lunes y miércoles, hombres los martes y jueves] para", precisó la Delegación, "tratar de minimizar el peligro que supone la acumulación de miles de personas en el entorno fronterizo de los dos países, tránsito ya alterado por las nuevas restricciones impuestas sobre determinados productos hasta ahora permitidos”.

Desde su entrada en funcionamiento, el 27 de febrero de 2017, el paso del 'Tarajal II' ha registrado la muerte por avalanchas o accidentes en sus inmediaciones de al menos seis porteadores, cinco mujeres y un hombre. El último fue un joven residente en la vecina localidad marroquí de Castillejos que falleció el sábado después de pasar dos días en coma tras precipitarse al vacío intentando burlar las colas que se organizan hasta desde 36 horas antes para acceder a Ceuta.