Desde las 11.30 horas de este lunes 20 de septiembre, último día del verano, Juan Gutiérrez es pre-candidato a suceder a Manuel Hernández al frente del PSOE de Ceuta. Gutiérrez sería, de momento, el único que se postula para esta nueva etapa de los socialistas ceutíes si no surge una alternativa en las menos de 36 horas que restan de plazo para presentar pre-candidatura.

Una cuestión que a estas horas, sigue en el aire y que no se resolverá hasta las 20.30 horas de este martes 21 de septiembre, plazo límite para presentar un proyecto alternativo al de la actual Ejecutiva. De momento, de los dos rivales que en 2015 se disputaran las primarias socialistas con Manuel Hernández, uno se desmarca y el otro se lo sigue pensando.

Quien se desmarca de cualquier carrera por el liderato del PSOE de Ceuta es Pablo Núñez, en la actualidad asesor de Delegación de Gobierno, quien ha confirmado a Ceuta al Día que no alberga. Intención alguna de postularse. “Mis compromiso está centrado en apoyar al Gobierno de España a través de Delegación”, zanja Núñez, que aboga por un partido más activo, “que desarrolle un nuevo modelo de Ciudad de cara al futuro y sobre todo ponga a Ceuta por encima de intereses particulares”. Núñez ignora si habrá alternativa, su atención, explica, está puesta en la labor de Delegación en un momento crítico para Ceuta “No sé si alguien se va a presentar y si lo hace tiene mi respeto. Eso hace al PSOE más fuerte”, aboga.

Quien aún se lo está pensando es Antonio Gil, quien fuera el tercer candidato en aquellas primarias de 2015 para buscar sucesor a José Antonio Carracao. Gil explica a Ceuta Día que desvelará su decisión “mañana”, esto es, el último día hábil para presentar candidatura. La decisión depende de si puede acceder a la información real de la militancia incluida en el censo y por tanto con derecho a voto, una información crucial que, lamenta, ha tenido que reclamar a Ferraz.

El difícil acceso al censo de militantes —“es muy complicado tener posibilidades si no conoces a quienes pedir el voto”— y la escasa participación de la militancia y la falta de vida interna —“un partido inexistente, con muchos afiliados y muy pocos militantes”—, son algunos de los reproches desde el sector más crítico con la actual ejecutiva. Un sector que, a la espera de lo que decida Antonio Gil, no parece que vaya a plantear un modelo alternativo de partido.

De ser así y la de Gutiérrez es la única candidatura aún debería recorrerse el itinerario previsto en unas primarias. El comité electoral y de ética debe dar su visto bueno y a partir de ahí, entre el 21 y el 27 de este mes, el candidato debe recabar los necesarios avales que, de conseguirlos, lo convertirían de facto en el secretario general accidental de los socialistas ceutíes, a la espera d el celebración del congreso regional los días 4,5 y 6 de noviembre.