Pese a dar su apoyo al plan, la diputada de MDyC, Fatima Hamed, echa en falta muchas cosas pendientes en el proyecto del Gobierno, empezando por la autocrítica. “Después de 20 años no tienen culpa de nada de lo que sucede en Ceuta, los problemas se han producido de forma exógena y nada ha tenido que ver su gestión. Un poco de humildad les vendría bien”.

Para Hamed , las 140 medidas del plan “no son otra cosa que los proyectos que se han dejado de hacer en estos veinte años que llevan hibernando y algunas ensoñaciones”. Pero hay otras cuestiones urgentes que parecen olvidar legislatura tras legislatura, recordó muy crítica Hamed, apuntando un largo listado en el que destacan eternas promesas como el PGOU o la reforma del IPSI más allá de “helicópteros, yates, juego on line y publicidad”. Promesas eternamente olvidadas a las que añadió las hechas por Madrid y nunca realizadas, apuntó, poniendo en duda las bondades del apoyo de los sucesivos Gobiernos d e la Nación para con los ceutíes. Una falta de compromiso, responsabilidad de PP y PSOE a partes iguales, que demostró con un dato, el de la inversión per cápita en Ceuta en la última década, ue ha sufrido un brusco descenso de casi el 80 por ciento y está por debajo de la media nacional. O proyectos que se demoran durante años, como la frontera inteligente o el Palacio de Justicia, siguió enumerando la líder localista.

Fatima Hamed alertó también de la pretensión de modificar la excepción Schengen y “cerrar la puerta por motivos ideológicos” a las relaciones con Marruecos que propugnan PP y Vox, limitando aun más las posibilidades de desarrollo de la ciudad.

“La crisis viene de muchísimo antes, los problemas son los mismos de hace veinte años, algunos se han acrecentado por que el Gobierno no tiene proyecto para Ceuta, han ido saltando de un modelo a otro sin sentido”, lamentaba Hamed, que lamenta que estos vaivenes hayan creado una Ceuta que vive en la dualidad: una mitad tiene trabajo y opciones de futuro y la otra está al borde de la exclusión social.